Ser infeliz
De: Franz Kafka Cuando ya eso se había vuelto insoportable -una vez al atardecer, en noviembre-, y yo me deslizaba sobre la estrecha alfombra de mi pieza como en una pista, estremecido por el aspecto de la calle iluminada, me …
De: Franz Kafka Cuando ya eso se había vuelto insoportable -una vez al atardecer, en noviembre-, y yo me deslizaba sobre la estrecha alfombra de mi pieza como en una pista, estremecido por el aspecto de la calle iluminada, me …
De: Cacique Guaicaipuro Cuatemoc Discurso del cacique mexicano Guaicaipuro Cuatemoc ante la reunión de Jefes de Estado de la Comunidad Europea, el 8 de febrero de 2002. Aquí pues yo, Guaicaipuro Cuatemoc, he venido a encontrar a los que celebran …
De: Bram Stoker Cuando iniciamos nuestro paseo, el sol brillaba intensamente sobre Múnich y el aire estaba repleto de la alegría propia de comienzos del verano. En el mismo momento en que íbamos a partir, Herr Delbrück (el maitre d’hôtel …
De: J. M. Machado de Assis Se cumplió fielmente esta cláusula testamentaria. Joaquim Soares hizo el cajón en que fue introducido el cuerpo del pobre Nicolás B. de C.; lo fabricó él mismo, con amore; y, por fin, con un gesto …
Los dos hilos: Análisis de las dos historias De: Ricardo Piglia I En uno de sus cuadernos de notas, Chejov registró esta anécdota: «Un hombre, en Montecarlo, va al casino, gana un millón, vuelve a casa, se suicida». La forma …
Jorge Luis Borges Y Dios lo hizo morir durante cien años y luego lo animó y le dijo: -¿Cuánto tiempo has estado aquí? -Un día o parte de un día, respondió. Alcorán, II, 261. La noche del catorce de marzo …
De: Rodolfo Walsh El coronel elogia mi puntualidad: -Es puntual como los alemanes -dice. -O como los ingleses. El coronel tiene apellido alemán. Es un hombre corpulento, canoso, de cara ancha, tostada. -He leído sus cosas -propone-. Lo felicito. Mientras …
Cuento escrito por Joaquim Ruyra. El abuelo Guixer era un viejecito de piernas baldadas, antiguo pescador, que se pasaba las horas cantando a veces, otras renegando (este era un dejo del oficio), rezando otras, pero siempre conservándose bonachón y candoroso …
Cuento escrito por Emilia Pardo Bazán. Cuando doña Maura Bujía, viuda de Pez, vio incrustarse en el marco de la puerta a aquel vejete de piernas trémulas y desdentada boca, apoyado en un imponente bastón de caña de Indias con …
Cuento escrito por Anónimo hindú. El Buda fue el hombre más despierto de su época. Nadie como él comprendió el sufrimiento humano y desarrolló la benevolencia y la compasión. Entre sus primos, se encontraba el perverso Devadatta, siempre celoso del …