Determinar las metas

Para la determinación de metas se consideran dos muy importantes que son:

  • Metas de producción: estas contienen una declaración explícita del tiempo de productos de los niveles de actividad o estándares de productividad y se refieren generalmente a las preguntas ¿qué? Y ¿Cuánto?, estas se proyectan a plazos cortos.

    Estas son de tipo cuantitativo y cualitativo, hacen referencias a acciones no cuantificables, como es el caso de la regulación de mercados, formulaciones de políticas o relaciones exteriores, o cuando cuya finalidad es dar un marco ético- político a la acción de la organización.

  • Metas de gestión: estas hacen referencia a la calidad del proceso que da lugar a la obtención de dicho producto.

    Una meta de gestión debe tener el propósito de mejorar los procesos institucionales en alguna de sus dimensiones: calidad, eficiencia, eficacia y economía.

    Debe ser un compromiso cuyo cumplimiento dependa básicamente de la acción interna de la organización y de las decisiones de otros servicios públicos o de factores exógenos.

Fases que funcionan de manera cíclica:

  • La identificación de los objetivos y estrategias institucionales
  • La definición de las metas de producción y gestión
  • El diseño de los proyectos necesarios para su logro y
  • La evaluación del logro de las metas.