Sentido tradicional de la ciencia

La ciencia ha venido teniendo diferentes acepciones conforme ha ido transcurriendo el tiempo; se consideraba que la realidad estaba ahí, esperando a que el científico la observara, la describiera en sus regularidades y pudiera establecer principios de regularidad en sus manifestaciones. Se hacía mucho énfasis en cuidar la objetividad de lo que se hacía, y esto estaba referido a que la subjetividad del investigador no contaminara su actividad investigadora.

Gran parte de la validación de lo que se hacía tenía como criterio de validez el método según el cual se realizaban las acciones; todo mundo quería llevar a la práctica el método científico. Había una gran preocupación por la pretensión de universalidad del conocimiento producido, los conocimientos de la ciencia deberían ajustarse a una generalidad y universalidad como los que parecían tener los realizados en física, química, etc.

Se fueron desarrollando ciencias, que consideraron que tenían un objeto de estudio, un método y toda una problemática por investigar, se desarrolló la hiperespecialización. En el campo de la educación, la pretensión de la pedagogía como ciencia de la educación era fácilmente arrollada por ese cúmulo de ciencias de la educación. Campos como el de la educación siempre fueron problemáticos para esta tendencia que quería otorgar una parcela de la realidad a cada ciencia.

La necesidad de que los enunciados se construyeran a partir de muchos datos estadísticos parecía darle más veracidad a las afirmaciones. Sin embargo, al interior de las ciencias duras como la física, la química, las matemáticas, se fueron encontrando callejones que no tenían salida. Descubrimientos que hacían bajar la guardia a la visión optimista de tener conocimientos que pudieran dar cuenta de la realidad tal como era. Las afirmaciones se cuestionaban desde la estructura del sujeto que las enunciaba y del medio por el cual se hacían.

Algunas ideas que parecen fundamentales son las siguientes:

– La realidad como tal no es algo que esté fuera del sujeto, el cual sólo tiene que ir a tomarla allá afuera. La realidad se va construyendo a partir de un conjunto de selecciones y clasificaciones que realiza el sujeto. En este proceso tiene dos herramientas importantes, una es el lenguaje y la otra el pensamiento.

– Sólo se puede ir construyendo el conocimiento, a partir tanto de las acciones mismas de la indagación, como de la indagación de quien indaga. El sujeto no está excluido del proceso de conocimiento, forma parte de él. Por lo tanto, no es el proceso de la investigación algo externo y que no puede ser influido por el sujeto, sino que es ya la acción de conocer la que está modificando a quien está conociendo.

Esto lo considero especialmente válido para las ciencias sociales y para la investigación en educación, ya que en otras ciencias como la astronomía los objetos parecieran estar ahí siempre del mismo modo y muy externos al sujeto que conoce.

– La ciencia se construye básicamente a partir del conjunto de los consensos que se van tejiendo entre los investigadores, a partir de las reglas del juego que ellos mismos van estableciendo, ya sea en los procedimientos o en el lenguaje.

– El mundo y la realidad que se percibe depende de la capacidad de percepciónde quien percibe, de tal manera que se pueden percibir mundos y realidades diferentes. Por lo cual, yo no puedo garantizar que mi percepción sea la única, ni la mejor, ni la verdadera, sólo puedo dar mis argumentos de por qué la percibo así y no de otra manera.

– Es no solamente establecer las acciones de investigación, sino a la vez, incluir en el proceso los conceptos claves y las relaciones lógicas que controlan al pensamiento.

– Es a partir de la problematización del pensamiento que piensa, que este punto de vista se acerca mucho a las ciencias cognitivas (cibernética de la segunda generación, psicología genética, terapia sistémica, etc.)

Autor: Juan Campechano Covarrubias /Asesor de Investigación y Posgrado de la Coordinación de Formación y Actualización de Docentes de la Secretaría de Educación Jalisco.
Fuente: Revista educar del estado de Jalisco