El mercado financiero

En el mercado financiero, las familias le compran acciones y certificados a las empresas. Las familias ofrecen fondos a este mercado con la esperanza de obtener ingresos extraordinarios en forma de dividendos sobre las acciones e intereses sobre los certificados. Las familias también demandan (toman prestados) fondos de este mercado para financiar diversas compras. Las empresas contratan créditos para construir instalaciones nuevas con la esperanza de ganar más en el futuro. El gobierno se endeuda emitiendo certificados.

El resto del mundo concede préstamos y contrata créditos en el mercado financiero; todos los días la radio transmite información sobre los mercados de valores de Inglaterra y Japón. Gran parte de los préstamos y los créditos de las familias, las empresas, el gobierno y el sector internacional son coordinados por instituciones financieras —bancos mercantiles, sociedades de crédito y ahorro, compañías de seguros, etcétera—. Estas instituciones aceptan depósitos de un grupo y se los prestan a otros.

Cuando una empresa, una familia o el gobierno contratan un crédito para financiar una compra adquieren la obligación de reembolsarlo, por regla general, dentro de un tiempo futuro especificado. La mayor parte de los créditos también entrañan el pago de intereses por concepto de un cargo por usar los fondos tomados a crédito. Cuando se concede un préstamo, el prestatario casi siempre firma una «promesa de reembolso», o pagaré, y se lo enrasa al prestamista.

Cuando el gobierno federal se endeuda, emite «promesas» llamadas certificados, notas o bonos de tesorería a cambio del dinero. Las sociedades emiten certificados de sociedades a tasas de interés fijo. Por ejemplo, un certificado de una sociedad puede decir: «General Electric Corporation conviene que pagará $5,000 al tenedor de este certificado el 1 de enero de 1055, y los intereses sobre el mismo, al 8.3% anual hasta la referida fecha».

Las empresas, en lugar de emitir certificados para reunir fondos, también pueden emitir acciones de capital. Una acción de capital es un instrumento financiero que otorga a su tenedor una parte del dominio de la empresa y, por tanto, el derecho a una parte de sus utilidades.

Si la empresa funciona bien, el valor de las acciones incrementa, y el accionista recibe ganancias de capital’ sobre su compra inicial. Además, las acciones pueden pagar dividendos; es decir, la empresa puede optar por devolver parte de sus utilidades a los accionistas de manera directa, en lugar de conservarlas para usarlas. Empero, si la empresa funciona mal, el accionista sale afectado. El valor de las acciones de capital puede bajar y quizá no haya dividendos.

Es importante recordar que las acciones y los certificados sólo son contratos o convenios entre las partes. Yo convengo prestarle una cantidad cualquiera, y usted conviene reembolsarme esta cantidad y un extra en una fecha futura; o yo convengo comprar parte del dominio de su empresa y usted conviene darme una parte de las utilidades futuras de la empresa.

Una de las variables centrales del mercado financiero es la tasa de interés. Aunque en ocasiones se habla como si sólo hubiera una tasa de interés, en un momento dado a cualquiera, nunca existe sólo una tasa de interés. La casa de interés sobre un préstamo dado refleja, más bien, el plazo del préstamo y el riesgo que percibe el prestamista. Por ejemplo, un negocio que acaba de empezar, tendrá qu e pagar una tasa más alta que IBM.

Una hipoteca a 30 años tiene una tasa de interés diferente a un préstamo a 90 días. No obstante, las tasas de interés tienden a subir y a bajar juntas y su movimiento refleja las condiciones generales del mercado financiero.

Fuente: Apuntes de Macroeconomía de la Unideg