¿Qué es utilización total?
Este concepto se define como el valor de las compras realizadas por los productores, las familias y el gobierno de los bienes y servicios producidos por la economía más los importados en un período determinado.
El Sistema de Cuentas Nacionales desglosa la demanda total en dos grandes rubros, de acuerdo a la función económica que realicen los compradores. Dichos conceptos son la demanda intermedia y la demanda final.
La demanda intermedia está constituida por el consumo de materias primas, materiales de oficina y servicios, entre otros, que se emplean directamente en los procesos productivos. La demanda intermedia es ejercida en su mayor parte por los establecimientos industriales, comerciales, y de servicios al desarrollar las actividades propias de su giro.
La demanda final está integrada por las compras que realizan los consumidores finales de los bienes y servicios producidos por las unidades productivas. El Sistema de Cuentas Nacionales considera en este rubro las compras de las familias y del Gobierno, así como las exportaciones. También se incluyen dentro de la demanda final la variación de existencias y la formación bruta de capital fijo.
La distinción fundamental de los demandantes finales es que compran los bienes y servicios para satisfacer sus propias necesidades, mientras que los demandantes intermedios los adquieren para transformarlos o enajenarlos en alguna de las etapas del proceso de producción o distribución.
La característica de los bienes y servicios producidos puede determinar el destino a la demanda intermedia y a la demanda final. Entre los sectores que dirigen casi la totalidad de su producción a la demanda intermedia, están, por ejemplo la petroquímica básica, la elaboración de resinas sintéticas y la elaboración de alimentos para animales.
Por su parte podemos mencionar como actividades que destinan la totalidad de su producción a la demanda final, a los sectores de la construcción y de servicios educativos. En el primer caso se trata de un sector que produce activos fijos que se registran en la formación bruta de capital y el segundo, constituye un servicio que beneficia directamente a los educandos.
Fuente: Apuntes de Macroeconomía de la Unideg