Ladillas
También llamada pediculosis. Es una infección producida por unos parásitos (piojos) que viven en el vello del pubis. Estos bichitos chupan la sangre y ponen sus huevos (liendres). Sus picaduras provocan molestos picores. Se contagian a través del contacto físico, compartiendo ropa, toallas… Para su tratamiento existen lociones y jabones especiales.
Las ladillas son parásitos que se les conoce como Pediculus pubis o Phthirius pubis. Su transmisión es por contacto entre el vello de dos personas o bien al compartir la misma ropa, por mantener actividad sexual promiscua, mantener relaciones sexuales con personas infectadas.
Origen
El estudio genético más reciente indica que la ladilla se relaciona con el piojo endémico del gorila, Pthirus gorillae, y que pudo haber pasado a los homínidos tempranos desde los ancestros de los gorilas, hace varios millones de años atrás. Hasta ahora se pensaba que habían divergido en el propio humano.
Síntomas
La infestación por ladillas produce picor (prurito), pero no hay lesiones cutáneas. Si éstas están presentes es debido al rascado o por una infección agregada. Hay ocasiones y sobre todo en jóvenes que las ladillas se pueden encontrar en las cejas, provocando una blefaritis.
Tratamiento
Existen cremas, champús y lociones que contienen hexacloruro de benceno gamma opermetrina y que son igualmente eficaces mientras se usen correctamente. A los sujetos diagnosticados de ladillas, se les recomienda comentar su infestación con sus parejas sexuales con objeto de frenar epidemias.
La reinfestación puede suscitarse, ya que una vez que las ladillas han sido separadas del cuerpo, pueden sobrevivir hasta 24 horas, mientras que los huevos o liendres hasta seis días, por ello una vez curado se debe repetir el tratamiento de 7 a 10 días después para eliminar los huevos que hayan quedado ya que en 7 a 10 días se convierten en ladillas, por eso se debe desinfectar una semana después de la primera limpieza.
Fuente: Instituto Asturiano de la juventud