Certificación de la producción orgánica

La certificación orgánica es un proceso anual, en el cuál, una tercera parte independiente, ofrece una garantía por escrito de que un producto, proceso o servicio cumple con una norma determinada, esto quiere decir, que ha sido producido bajo estándares orgánicos. La certificación es importante para la comercialización en los mercados internacionales de productos orgánicos, ya que es una garantía de la procedencia de los productos y da seguridad al consumidor de que los productos que están consumiendo, están de acuerdo a las regulaciones orgánicas existentes.

Además, esta llamada tercera parte independiente, (Las empresas certificadoras), son organismos que cuentan con una oficina implementada con personal que coordina el proceso de certificación y que puede tener inspectores propios, o bien, contratar los servicios de un inspector externo para realizar la inspección del predio; la decisión final sobre el productor, si es certificado ó no, será tomada por el comité de certificación de dicha empresa certificadora.

Es importante destacar que también se revisan los procesos de elaboración de productos orgánicos procesados (deshidratado, conservas, congelados, pastas). Aquí, fundamentalmente la revisión se orienta a conocer el origen de las materias primas, ingredientes utilizados, flujo de productos, tecnología empleada, proceso productivo, y almacenaje de los productos. Se exigen las mismas normas, tanto si la elaboración se desarrolla en el predio como si se desarrolla por una empresa externa, que opera fuera del predio. Además así como ocurre cuando se certifica a un productor en su predio, la empresa elaboradora de productos debe llevar registros tanto de la compra de materias primas, procedimiento de elaboración del producto y ventas del producto con el fin de poseer información acerca de éstas áreas, que puede ser solicitada en posteriores inspecciones, por parte de un inspector calificado

A continuación detallaremos las etapas que están involucradas en el proceso de inspección y certificación de un predio:

1. Contacto entre el productor y la empresa certificadora: Donde ésta última hace llegar el formulario de solicitud de certificación al productor, que lo debe llenar con los datos principales del predio, ubicación, superficie total, cultivos y especificando lo que desea certificar.
2. Enviada la solicitud de certificación por el productor, hacia la empresa certificadora, ésta elabora un presupuesto que será enviado al productor para su aprobación.
3. Una vez aceptado el presupuesto, el productor, debe enviarlo de vuelta firmado adjuntando con este documento los datos solicitados por la certificadora para la confección del contrato. Una vez realizado el contrato debe ser firmado notarialmente por ambas partes (productor y empresa certificadora), cancelando un porcentaje del presupuesto acepado y documentando el resto.
4. El productor debe llenar un cuestionario con la información del predio que desea certificar como orgánico (“Ficha de inspección”). Aquí debe hacer mención a la historia del campo, superficie, cultivos, rotaciones, fertilizaciones, control de plagas y enfermedades, además de describir prácticas culturales actuales, y un plan de manejo del predio, donde indique las rotaciones culturales, para los próximos años. Es necesario que el productor mantenga, dentro de lo posible, registros de todas las ventas y compras ocurridas en el predio.
5. La empresa certificadora, una vez que el productor ha completado la ficha de inspección designa a un inspector calificado para que realice la visita al predio y verifique la información entregada.

Es importante señalar, que para la primera inspección es importante que el productor tenga a mano: El plano del predio con los deslindes, individualizando cultivos y parcelas en que se divide el predio en ese momento, Copia de ficha de inspección completa y cualquier documentación adicional que pueda aportar datos para describir de mejor manera el predio y por supuesto, el contrato que firmó con dicha empresa certificadora.

 6. Visita al predio del inspector calificado: Esta visita debe hacerse junto con el productor o encargado del predio, lo que permitirá al inspector constatar en terreno los datos entregados en la ficha de inspección y formarse una imagen del tipo de manejo agrícola y pecuario. 

7. El inspector debe revisar las notas y registros del productor. Es preciso señalar que los registros de compra y venta deben ser llevados, como se llevan los registros contables y deben estar disponibles en todo momento. En general las empresas certificadoras solicitan los siguientes registros:

  • Compras y aplicación de abonos
  • Compra de alimentos y forrajes
  • Compra, elaboración y uso de productos fitosanitarios autorizados.
  • Prácticas culturales realizadas
  • Plan de manejo de plagas, enfermedades y nutrición.
  • Salidas para ejercitación de los animales, solamente cuando haya estabulación invernal.
  • Uso de medicamentos
  • Composición de la masa ganadera
  • Procedencia y venta de animales
  • Uso y calidad del material de siembra y plantación

8. El inspector, cuando ha finalizado su visita, elabora un “Informe de inspección” basándose en información obtenida por los formularios de inspección, registros diarios del predio e inspección visual. Este “Informe de inspección” lo envía a su empresa certificadora para revisión, solicitando posteriormente una solicitud de reconocimiento del predio como explotación en transición o conversión para el primer año. En la empresa certificadora, se envía este informe a un Comité de Certificación, el cuál es una entidad independiente de la empresa, que lo va a evaluar para posteriormente aprobarlo, aprobarlo con condiciones o rechazar la certificación.

9. Cuando el comité de certificación entrega su respuesta, se elabora el certificado de producto orgánico en transición (o en conversión), o producto convencional. Este certificado se extiende para uno o varios productos determinados y para una producción asociada.

Fuente: Red de mujeres para el desarrollo – www.redmujeres.org