Anecoica cámara
Es una cámara cuyas paredes tienen una estructura tal que absorben todos los sonidos. Las superficies superiores están cubiertas de material absorbente del sonido, como fibra de cristal o lana mineral, tanto en planchas como en cubos verticales y horizontales. El techo y el suelo están rellenos de forma similar; con una estrecha malla metálica justo por encima del suelo, que proporciona una superficie óptima para poder andar. La reflexión del sonido se puede reducir de uno a 1000 en esta habitación, simulando las condiciones acústicas de espacio libre no obstruido.
Estando en su interior se siente una desagradable sensación de total acolchamiento y es posible, después de algunos segundos de adaptación, sentir perfectamente los latidos del propio corazón.
Las cámaras anecoicas son empleadas para estudiar las reacciones humanas al silencio absoluto. Una cámara anecoica o anecoide es una sala especialmente diseñada para absorber el sonido que incide sobre las paredes, el suelo y el techo de la misma cámara, anulando los efectos de eco y reverberación del sonido y se mide en decibelios (dB).
El sonido es en realidad una onda que transmite energía mecánica a través de un medio material como un gas, un líquido o un objeto sólido. De este modo, cuando una onda de sonido incide sobre una superficie se da un efecto de reflexión. En la naturaleza se da este fenómeno en todo entorno, salvo en el vacío, donde el sonido no se puede transmitir. En cualquier medio a través del cual se propague el sonido, tienen lugar la reflexión y la absorción y como fruto de ellas ocurren los efectos de reverberación y eco. El sonido, a diferencia del ruido se compone de ondas regulares.