El trasplante de médula ósea es un procedimiento que se practica en el tratamiento de diversas enfermedades neoplásicas como leucemias, linfomas, mieloma múltiple y tumores sólidos, también es empleado en padecimientos como aplasia medular grave, talasemia mayor y deficiencias inmunes congénitas, en particular cuando otros intentos terapéuticos no han dado resultado satisfactorios o no existen.
Dado el riesgo infeccioso, es deseable que la condición oral del paciente hubiera sido controlada. La radiación, la quimioterapia y la posibilidad de EICH, hacen que un paciente con TMO, pueda mostrar agudización de estados crónicos infecciosos, mucositis y tardíamente hiposalivación.
La participación estomatólogica será preventiva y educativa, requiriéndose su participación constante en el control de manifestaciones de mucositis y participa en la solución de los cambios infecciosos.
La gravedad del estado hiposalivatorio y de las secuelas en mucosa y dientes, así como la repercusión psicológica de que los estados de hiposalivación y xerostomía producen, marcarán el grado de participación del odontólogo a corto y largo plazo.
Fuente: Medicina en odontología