El parto en la cabra
Si bien en la mayoría de los casos el parto se desarrolla sin problema alguno, siguiendo el curso que marca la naturaleza, a veces se hace necesaria la intervención del hombre. El caprinocultor asesorado por algún experto, deberá aprender cuanto antes si ha llegado o no el momento de intervenir.
Pero, mucho cuidado, porque si bien se recomienda generalmente rapidez en la intervención, la precipitación y la brutalidad deben excluirse radicalmente.
Signos que preceden al parto:
– La ubre de la cabra se prepara para la próxima lactación y aparece tensa y dura
– Los ligamentos musculares en la base de la cola se relajan y distienden (se dice que la cabra “se quiebra”)
– El tapón mucoso que hasta ahora cerraba el cuello del útero desde el inicio de la gestación es expulsado, lo que se traduce en la aparición de un flujo vaginal, más o menos visible en la comisura inferior de la vulva.
– La cabra bala frecuentemente (llamar la atención).
– La cabra busca un lugar apropiado, favorable para el parto (“hace su nido”), manifestando una evidente inquietud.
– Finalmente cuando el parto es ya eminente, aparece la primera bolsa de las aguas (anexos placentarios) por la vulva y se rompe. Entre la ruptura de las bolsas (“salida de las aguas” y el nacimiento del cabrito suelen transcurrir, aproximadamente, dos horas.
Fuente: Secretaria de la reforma agraria. México