Abuso sexual

Por abuso sexual entendemos la implicación de menores en actividades sexuales ejercidas por adultos y que buscan principalmente la satisfacción de éstos. Las personas menores de edad son aún inmaduros y dependientes, y no pueden ni comprender el sentido de estas actividades ni, por tanto, dar su consentimiento real.

Signos de sospecha de abuso sexual:

  • Dolor, golpes, quemaduras o heridas en la zona genital o anal.
  • Dificultad inexplicable para caminar y/o sentarse.
  • No querer participar en las actividades deportivas ni usar ropa adecuada para ellas.
  • Enfermedades de transmisión sexual en ojos, boca, ano o genitales
  • Signos de afectación emocional importante. Fugas. Cambios de conducta.
  • Conocimiento o interés exagerado por los comportamientos sexuales de los adultos.
  • Molestias inespecíficas indicativas de abuso crónico: incontinencia de esfínteres (enuresis, encopresis), dolor abdominal recidivante, problemas escolares recientes.

Fuente: Instituto Asturiano de la juventud