Colorantes de tina
A este grupo de colorantes pertenecen los que son insolubles o difícilmente solubles en agua cuando están terminados, por lo que en este estado no pueden ser aplicados a las fibras.
Por ello se obtiene primeramente un compuesto in-coloro (leucobase), que se aplica sobre la fibra. Después de ello, se efectúa la oxidación, que muchas veces tiene lugar con sólo agitar el tejido en el aire o bien se emplean oxidantes.
Como reductor para preparar la leucobase se emplea el hidrosulfito sódico Na 2S2O4, soluble en agua y que actúa sobre la fibra con mucha regularidad. En otros casos se emplea la llamada tina de sal Terrosa, en la que sirve como reductor el FeSO4. Mediante hidróxido cálcico se precipita de esta solución el hidróxido ferroso Fe(OH) 2 fuertemente reductor, que a su vez reduce el colorante insoluble a la leucobase soluble.
El hidrógeno naciente se emplea como reductor en la tina de polvo de cinc. Se añade polvo de cinc, que contiene cinc elemental, a una solución caliente de hidróxido cálcico, con lo que se forma, de acuerdo con la siguiente ecuación, hidrógeno naciente, que despliega inmediatamente su acción reductora.
Zn + Ca(OH) 2 → ZnO2Ca + 2 H
La tina más antigua es la tina de fermentación Hay ciertas bacterias, que transforman algunos colorantes en leucobases por reducción. Estas se aplican entonces a la fibra y se oxidan después en el aire a colorantes.
Fuente: Apuntes de procesos químicos de la UNIDEG