Proceso de reacción electrolítico
La electrólisis es una reacción química provocada mediante corriente eléctrica continua. Los aparatos necesarios se denominan electrolizadores. La transformación tiene lugar en los electrodos, de los que el dispositivo se llama ánod y el negativo cátodo.
Entre ellos debe de haber un electrolito para que tenga lugar conducción de corriente. Si aquél es una disolución, el proceso se llama electrólisis en disolución y si es un fundido, electrólisis en fase fundida. Las reacciones de electrólisis tienen aplicación en la descomposición de agua y sales, obtención de metales puros, tratamiento de superficies metálicas (cromado, etc),. procesos de oxidación y reducción, electrólisis cloro-álcali.
Realmente el electrolizador es una única célula de dimensiones relativamente pequeñas y que contiene todas las partes necesarias para una electrólisis: ánodo, cátodo y electrolito. 50 a 100 células se conectan para formar una serie, y una instalación electrolítica contiene varias series.
La construcción del electrolizador depende, en los detalles, de la reacción química a realizar, y así, por ejemplo, el material de los electrodos puede ser muy diferente. En la purificación electrolítica de metales se utilizan cátodos de metal puro y se emplean como ánodos barras de metal impuro.
Es bastante común el empleo de electrodos de carbón (grafito), por ejemplo, en la producción de aluminio. En la electrólisis cloro-álcali se utilizan también cátodos de mercurio. Si se requieren separar entre sí los productos de la electrólisis, es preciso subdividir la célula por medio de una tabique separador en un espacio catódico y otro anódico.
Un tabique poroso de esta clase, solamente permeable para la corriente eléctrica, se denomina diafragma. Tienen especial importancia en la electrólisis de disoluciones acuosas.
Fuente: Apuntes de procesos químicos de la UNIDEG