Válvula de globo
En las válvulas de globo, la apertura y cierre se consigue por el movimiento perpendicular de un cono o placa sobre la superficie de cierre. Las válvulas sirven para interrumpir o regular la corriente.
El inconveniente de las válvulas consiste en la gran pérdida de presión causada por los cambios de dirección de la corriente dentro del cuerpo de la válvula.
Ordinariamente, la corriente está dirigida contra el plano inferior del tapón de la válvula. Esto se indica y hace visible con una flecha moldeada sobre la carcasa de la válvula.
Debe ser tenido en cuenta en la instalación. Puesto que la presión se ejerce desde abajo sobre el tapón de la válvula, su fuerza es opuesta al cierre. Hay diferentes forma de válvulas de globo.
Por el giro del husillo (vástago), la válvula cierra generalmente hacia la derecha. En las válvulas automáticas (válvulas de control), la apertura y el cierre se pueden hacer de forma neumática o eléctrica.
Para mejorar su capacidad de control, las válvulas de control están dotadas de tapones en forma troncocónica o parabólicas. De este modo, los trayectos de apertura completa son más largos.
Esto ocurre especialmente con la válvula de aguja, cuyo tapón de cierre es en forma de aguja y permite un control más preciso del flujo. Como materiales de construcción de estas válvulas se utilizan fundición gris, fundición de acero, aleaciones de hierro, fundición de hierro, fundición siliciada, aleaciones de aluminio, bronce fundido y materiales plásticos.
Fuente: Apuntes de procesos químicos de la UNIDEG