Tasa mínima de rendimiento requerida
Cuando una persona o grupo de personas invierten en un proyecto lo hacen con la expectativa de obtener un rendimiento aceptable. La rentabilidad esperada se puede catalogar como buena si es superior a una tasa de referencia, la cual puede ser el costo de capital de las fuentes de financiamiento, ya que nadie quiere ganar menos de lo que le cuesta, o puede ser la tasa de oportunidad del mercado, concebida ésta como el mayor rendimiento que se puede obtener si se invirtiera el dinero en otro proyecto de riesgo similar disponible en ese momento.
Para ilustrar el concepto, supongamos que el señor Torres, propietario de una pequeña empresa productora de muebles, recibe un préstamo bancario de US $10 000 al 25% de interés anual. Este dinero lo puede invertir libremente en la alternativa más rentable. Uno de los proyectos en consideración consiste en expandir su empresa mediante la adquisición de maquinaria adicional. Un amigo del señor Torres está dispuesto a pagarle el 30% de interés anual si le presta dicho dinero.
Al evaluar el proyecto de expansión se requiere una tasa mínima de rendimiento que permita conocer mediante comparación si el proyecto es rentable o no. ¿Será el 25% o costo de capital la tasa mínima aceptable o el 30% que aparece como tasa de oportunidad?
Decidir cuál de las dos requeriría un análisis del riesgo involucrado en cada alternativa y la necesidad o no de expandir la empresa como requisito de supervivencia a largo plazo. Además, si el préstamo se concede únicamente para la inversión de expansión, no prima la tasa de oportunidad sino más bien el costo de capital, posiblemente ajustado de acuerdo con el riesgo implicado en la decisión.
Fuente: Apuntes de Finanzas de la UNIDEG