Las finanzas y el ambiente externo
Cualquier decisión financiera que se vaya a tomar debe consultar la influencia que pudieran ejercer los aspectos del ambiente empresarial externo, en lo que concierne a la situación económica nacional e internacional, disposiciones gubernamentales, inflación y devaluación, régimen tributario, coyuntura social y política, tendencias del mercado interno y externo, competencia y tecnología.
Los fenómenos económicos presentes y futuros repercuten directa e indirectamente en cualquier tipo de empresa, ya sea facilitando su desarrollo, al crear más oportunidades, o propiciando amenazas, que si no se detectan a tiempo impiden al empresario reaccionar eficientemente.
Se afirma que son muy nocivos los efectos que un alto y sostenido incremento en los precios produce en el desarrollo económico de un país. Es necesario aprender a convivir con esta situación, por lo que se hace imperativo analizar cualquier decisión financiera, a la luz del impacto de la inflación. Esto contribuye a tener una información más actualizada y real de la posición económica de la empresa, permitiéndole aprovechar sus recursos con mayor eficiencia.
Una situación social inestable es factor crítico del riesgo operativo que asume una empresa; estar al tanto de su evolución no sólo contribuye a tomar decisiones que reduzcan el impacto negativo, sino que también permite a la empresa cumplir eficazmente y de acuerdo con sus recursos la misión social que le compete. Esto requiere de inversiones o desembolsos que algunas veces no posibilitan rendimientos económicos tangibles.
Tener presente la tendencia de los mercados nacionales e internacionales facilita al director financiero o empresario el aprovecha-miento de oportunidades de inversión lucrativas, relacionadas o no. con el giro normal del negocio. La diversificación en productos o mercados se abre como una alternativa para reducir el riesgo.
Fuente: Apuntes de Finanzas de la UNIDEG