Problemas y soluciones
Instalar memoria nueva en un ordenador puede llegar a ser una fuente importante de dolores de cabeza, no por la complicación de la operación, que es sencillísima, sino por multitud de pequeños problemas e incompatibilidades que en ocasiones ni siquiera tienen un motivo identificable.
¡¡No tengo ranuras libres!!
Pues tendrá que tirar o vender de segunda mano parte de la memoria que tiene actualmente; a los precios a los que se ha puesto la memoria, no debería ser un trastorno tan grave.
Si va a sustituir toda la memoria, aproveche para optimizarla un poco; es decir, que si actualmente la memoria es FPM de 70 ns instale la nueva de 60 ns, o si es EDO de 60 ns instale de 50 ns. Eso sí, siempre que su placa no indique la necesidad de usar memoria de una velocidad específica (generalmente, y mientras no mezclemos velocidades distintas, poner memoria más rápida no es problema; ponerla más lenta sí).
Fuente: Apuntes de Mantenimiento Computacional de la Unideg