Cintas magnéticas de datos – hasta más de 4 GB

Seguro que ha visto más de una vez en una película antigua o en la televisión esa especie de enormes armarios acristalados en los que unos círculos oscuros de más de 30 cm de diámetro giran como los mientras Sean Connery, encarnando al inefable 007, se enfrenta al científico loco de turno; bueno, pues esos círculos son cintas de datos de ordenador. Afortunadamente los tiempos han cambiado mucho: hoy en día las cintas de datos vienen con funda y no son mayores que las de música o las cintas de vídeo de 8 mm, lo que es un avance evidente; en cambio, sobre si Pierce Brosnan es tan buen 007 como Connery habría opiniones, aunque tampoco lo hace mal.

Las cintas magnéticas de datos o streamers figura presentan muchos problemas como dispositivo de almacenaje de datos: casi todos los tipos son tremendamente lentas (típicamente menos de 250 Kb/s, una velocidad casi ridícula); lo que es peor, los datos se almacenan secuencialmente, por lo que si quiere recuperar un archivo que se encuentra a la mitad de la cinta deberá esperar varias decenas de segundo hasta que la cinta llegue a esa zona; y además, los datosno están en exceso seguros, ya que como dispositivos magnéticos les afectan los campos magnéticos, el calor, etc, además del propio desgaste de las cintas

Entonces, ¿por qué se fabrican? Porque son baratas, muy baratas. Existen unidades lectoras-grabadoras por menos de 15.000 pts, y las cintas pueden costar unas 3.000 pts una de 2 GB. Pero el ser baratas no elimina el resto de problemas, por lo que sólo son prácticas para realizar backups masivos del disco duro (o selectivos, según), aunque teniendo en cuenta que el proceso para un disco duro de tamaño medio puede llegar a durar fácilmente un par de horas usando cintas normales.

Uno de los motivos que hace tan lentas a las cintas de datos es el tipo de interfaz que se utiliza. Generalmente se usa el conector para disquetera, el cual es muy lento, los comentados 250 Kb/s máximo(que rara vez se alcanzan); lo que es más, debe poder configurar la BIOS como si hubiéramos conectado una disquetera de 2,88 MB, lo que no es posible si la BIOS es antigua, como la de algunos 486 y las anteriores.

En el caso de que la BIOS admita como máximo disqueteras de 1,44 MB, la velocidad se reducirá a la mitad.

En otras cintas se utiliza el puerto paralelo (con mayor ancho de banda, pero apenas aprovechado) y en cintas de datos más caras y rápidas se utilizan terfcesin EIDE o SCSI, lo que aumenta el rendimiento pero nunca de forma espectacular, ya que el elemento más limitante es la propia maquinaria mecánica de a unidad. Además, el modo de acceso secuencial hace totalmente imposible usarlas de forma eficaz «a lo disco duro«, salvo que entendamos por esto esperar y esperar cada vez que queremos un fichero…

Los tipos principales de unidades de cinta son las QIC, Travan y DAT. Las Travan son una subclase que deriva de las QIC, con las que suelen guardar un cierto grado de compatibilidad; ambas forman el segmento económico del almacenaje en cinta, por ejemplo 20. 000 pts una unidad de 1 GB de capacidad y 2.000 pts cada una de las cintas correspondientes.

Las cintas DAT (Digital Audio Tape) figura son otra historia, desde luego, tanto en velocidad como en precio. El acceso sigue siendo secuencial, pero la transferencia de datos continua (lectura o escritura) puede llegar a superar 1 MB/s, lo que justifica que la práctica totalidad utilicen interfaz SCSI. Sin embargo, el precio resulta prohibitivo para un uso no profesional: más de 100.000 pts una unidad de 4GB de capacidad, aunque las cintas son baratas: unas 4.000 pts para una de 4 GB, por cierto realmente pequeña.

Marcas y modelos existen infinidad, ya que es un mercado muy maduro y basado en su mayoría en estándares, lo que redunda en unos precios más bajos y una mayor facilidad para encontrar las cintas apropiadas. Ejemplos destacados son los modelos Ditto de Iomega, los Colorado de Hewlett Packard, los TapeStor de Seagate y los modelos DAT de Sony o Hewlett Packard.

Para terminar, una curiosidad muy importante: la capacidad física real de las cintas de datos suele ser la mitad de la nominal indicada en el exterior de la caja de la unidad o de la cinta, ya que al sólo utilizarse para hacer backups, generalmente comprimiendo los datos, suponen que se va a alcanzar una compresión de 2:1. En realidad la compresión depende del tipo de datos a comprimir (los programas se comprimen poco y los archivos de texto mucho, por ejemplo), por lo que le recomiendo que piense más bien en una compresión 1,5:1. Resumiendo, que si la unidad se anuncia como de 2 GB, seguro que es de 1 GB (lo que vendrá en alguna parte pero en letras más pequeñas) y casiseguro que podrá almacenar más o menos 1,5 GB de datos comprimidos; en este texto no se ha usado este truco publicitario.

Fuente: Apuntes de Mantenimiento Computacional de la Unideg