Detectores de radiactividad
Conocidos también como radiómetros o intensímetros, nos permite la medición instantánea de la intensidad de las radiaciones en una zona determinada.
Existen dos tipos: De centelleo (los más exactos y precisos) y de cámaras de ionización.
Estos últimos pueden ser, a su vez, tipo contadores-proporcionadores o tipo Geiger-Muller.
Estos detectores llevan una percha telescópica extensible y dispositivos de alarma sonora y/o visual.
Para uso individual se utilizan dosímetros que permiten registrar la dosis de radiación recibidas por una persona en un tiempo determinado.
Fuente: Manual S.E.P.E.I. de Bomberos, Publicaciones de la Diputación de Albacete