La gerencia: tenemos los mejores jugadores, ¿y ahora qué?
Cuando tenemos los mejores jugadores en el campo, debemos dirigirlos. Estas seis prácticas que puede ser muy útiles:
- Déle primacía a los Recursos Humanos: asegúrese que el departamento de recursos humanos cuenta con lo necesario para cultivar líderes y carreras. El director de recursos humanos debería ser el segundo de abordo.
- Implemente un sistema de evaluación riguroso y que no sea burocrático: debe haber un modo simple y claro de medir el rendimiento de los empleados. Los gerentes deben evaluar a la gente por lo menos una vez al año.
- Cree mecanismos efectivos (dinero, reconocimiento, entrenamiento, etc.) para motivar y conservar a los empleados: quien haya hecho más, recibirá más. Asegúrese de que los mejores empleados no sólo sean alabados sino que reciban, además, bonos.
- Sea firme: con los sindicatos y mantenga su palabra. No permita que sus mejores empleados se vuelvan unos monstruos egoístas. Aprenda a gerenciar sus egos. Los buenos empleados que han topado con un callejón sin salida deben ser ayudados o descartados si no son capaces de continuar. Finalmente, llámeles la atención a las personas que causan problemas y, si no cambian, despídalos.
- No descuide a los empleados comunes: trátelos como si fueran el alma de la compañía. Sea atento con ellos y busque posibles estrellas.
- El organigrama de la compañía debe ser lo más horizontal posible: las responsabilidades deben estar claras, así como las personas a las que se les reporta. Los empleados deben tener claro quiénes son sus superiores.