Música y los instrumentos musicales
Desde los orígenes de la civilización, el hombre primitivo comienza a utilizar la danza y las ceremonias religiosas, para rogar a los dioses que resulten fructíferos la caza y los cultivos. A la vez va elaborando las técnicas de los sonidos con los que se comenzaron a acompañar los ritos.
Cada cultura tuvo concepciones diferentes en la apreciación y valor de la música. Unos le daban valor totalmente humano mientras que otros querían comunicarse con los espíritus.
En la civilización griega, en la época de la escuela Pitagórica, la música se transforma en la ciencia de los sonidos, se la relaciona con las matemáticas. Se elabora una concepción cósmica, relacionándola a la vez con la filosofía.
La música es melodía, es ritmo, es sonoridad, pero la escritura musical con un verdadero pentagrama, fue realizada por el monje italiano Guido d’Arezzo (990 – 1050), en el Siglo X. Este pentagrama constaba de cuatro líneas, empleaba claves y colores; y le puso los nombres a las notas musicales: do – re – mi – fa- sol – la – si a partir de las primeras sílabas de un texto latino.
En 1711 aparece el diapasón, inventado por el laudista inglés John Shore.
El metrónomo, utilizado para medir los tiempos, se cree que fue inventado por un amigo de Beethoven, el alemán Johnn Maetzel (1772 – 1832) quien lo patentó en 1816. A partir de 1988 se realizan metrónomos de cuarzo de mayor precisión.
El hombre comienza a cantar acompañándose con palmas y golpes con los pies. Ya en el paleolítico superior comienzan a inventar los primeros instrumentos de percusión, llamados idiófonos de choque, entre los que se usaron bastoncitos de bambú que se golpeaban unos contra otros, cajas de resonancia que consistía en tablas batientes colocadas sobre un hoyo. Evolucionan hacia los idiófonos de percusión, como troncos huecos, o cañas o bambúes ahuecados. De aquí derivan los timbales, el xilofón, gongs y tam-tam. Algunos fueron incorporados a la música sinfónica, debido a su riqueza sonora. Por ejemplo el xilofón fue incorporado por Saint-Saëns en 1864 a la orquesta, en la interpretación de «La Danza Macabra»
Los instrumentos membranófonos son los antepasados del tambor, y nacen cuando a las cajas de resonancia se les agrega una membrana. Y sucesivamente, surgen los cordófonos y los aerófonos.
Entre los instrumentos cordófonos más antiguos, aparece la cítara (cítara de bambú de Madagascar, cítara de enrejado de la India) y el arpa, que deriva del antiguo arco musical y ya se lo encuentra entre los Sumerios y en Egipto alrededor del 3000 antes de Cristo. Primero fue el arco de tierra usado en África, formado por un mango con una membrana y enclavado en un hoyo del terreno. El arco de caja, reemplazó el hoyo por una caja de resonancia. Y de allí derivan las arpas clásicas. Sufrió modificaciones a través del tiempo, hasta la realización del arpa de doble movimiento, fabricada por el francés Sebastián Érard en 1801.
En el Siglo XVI apareció el clavicímbalo y en el Siglo XVIII, el piano, cuyo antecesor es el échequier, instrumento de cuerdas golpeadas. El Clavicordio, llamado con este nombre a partir de 1631, tuvo su origen en el monocordio de Arquímedes (278-212 antes de Cristo).
El piano aparece en 1710, «el piano forte» realizado por Bartolomeo Cristofori, él mismo había realizado un clavicordio de pequeños martillos hacia 1698. Existe en el Metropolitan Museum de Nueva York un piano de éstos, de 1720. Se fueron perfeccionando a través del tiempo. Silbermann mejoró los martillos y J. A. Stein, en 1789 agregó los pedales. El francés Sebastián Érard en 1822 le agrega el escape doble, para permitir la repetición de la nota. Por ello hay quienes lo consideran el verdadero inventor de este instrumento.
El órgano tiene un origen antiguo, hacia el siglo III antes de Cristo, y los primeros se armaron a partir de una especie de flauta de pan provistas de bombas de aire que lo enviaban a los tubos (se los llamó hidraule). Hay varias teorías sobre su realizador. Una dice que fue el griego Ctésibios de Alejandría, mientras que otra sostiene que fue debido a Arquímedes en el 220 antes de Cristo.
En 1800 aparece el órgano de Barberi, usado para acompañar a músicos ambulantes. Diferente fue el «limonaire» inventado en 1880 por los hermanos Limonaire.
El violín nace entre los instrumentos de arco del medioevo, usado también en el Renacimiento. El violín como tal aparece en Francia en el año 1529. En Italia, en los siglos XVII y XVIII se los construye como obra de arte, y aparecen luthiers como Amati, y Stradivarius (posiblemente 1644-1737). Éste último construyó más de un millar de instrumentos. Él también fue quien en 1683 realizó el violonchelo que perduró hasta nuestros días.
Alrededor del año 1000 antes de Cristo aparece en Siria un instrumento llamado kettarah, pero sin mástil, aunque se supone que es el antecedente de la guitarra. La guitarra moderna fue creada por A. de Torres, laudista español. La guitarra eléctrica, ya en la era de los instrumentos eléctricos y electrónicos, nace en 1935, inventada por el estadounidente Rickenbacher, aunque en 1931 aparece una guitarra hawaiana: la Frying Pan o sartén. En 1947, Paúl Bigsby inventa el sistema de «vibrato» y le construye la primera guitarra de este tipo a Merle Travis. En 1978, el fabricante sueco Hagstron y el norteamericano Ampeg sacan al mercado la guitarra sintetizadora. En 1987 el francés Olivier Betticare patentó el micro intercambiable.
La flauta tiene sus orígenes en la prehistoria. En el medioevo se usaba en especial la flauta dulce y a partir del Siglo XVII, la flauta traversa o traversera, popularizada en esa época por los flautistas Hottetere de París. La flauta perfeccionada, y de metal es realizada por el alemán Theobald Böhm, en 1832, siendo flautista en la Capilla Real de Munich. En 1984 el francés Jacques Lefèvre inventa y presenta en Japón la flauta octobasse que registra dos octavas.
El corno también es muy antiguo. Los cazadores y los guerreros los usaban, sacándolos de los animales, los tallaban o adornaban, usaban el olifante o cuerno de elefante. En el siglo XVII se lo tomó en cuenta para integrar la orquesta y en 1815, el alemán Stölzel realizó un corno cromático de llaves, que perdura hasta nuestros días.
El Oboe era conocido en Egipto hacia el 2000 antes de Cristo. Provenía del aulos de doble lengüeta, invento que los griegos adjudicaban a los dioses (Apolo o Minerva). El oboe actual fue perfeccionado en el Siglo XIX por Frédéric Triébert. La trompeta era en sus comienzos recta. Se ha hallado un ejemplar que data del 2000 antes de Cristo.
En el Siglo XV se le dio una forma de S, pero recién se perfeccionó en 1815, cuando se fabricó la trompeta de llaves, que también se cree que la realizó el alemán Stölzel. El clarinete es más cercano a nuestros días. Aunque proviene de antiguos instrumentos de Egipto antiguo, el arghoul, del aulos de Grecia y de los caramillos del siglo XVII. En Nuremberg, el alemán Jean-Christoph Denner, aproximadamente en 1700, lo inventó.
La armónica fue inventada en 1821 por el alemán Buschmann. La logró queriendo fabricar un instrumento para afinar pianos. En 1857, un fabricante de órganos, Mathías Hohner, agregó a su industria la fabricación de armónicas.
El acordeón actual fue inventado por el austríaco Curil Demián en 1829. Sus antecedentes son el sheng chino inventado -según cuentan ciertos textos- alrededor del 3000 antes de Cristo por la reina Nyu Wu.
El bandoneón, similar al acordeón pero de forma hexagonal, fue inventado por el alemán Heinrich Band en 1850. Es utilizado como esencia de la música de tango, por lo que llegó a Argentina en 1870 y pasó a convertirse en sinónimo de música ciudadana y se convirtió en un instrumento nacional.
El saxofón fue inventado en 1846 por el belga Adolph Sax (1814 – 1894). Se lo utilizó en las bandas militares y luego en el jazz.
La batería se atribuye a alguien de Nueva Orleáns que la inventó hacia 1910, pero recién en 1950 toma las características actuales.
La primera caja de música se cree que fue realizada en Ginebra por el relojero Fabre en 1796, con un mecanismo de cilindro de clavijas. Su antecesor es el carrillón mecánico del siglo XIV.
Aunque se citan aquí algunos instrumentos musicales, innumerable es la lista de los mismos, pues el hombre ha creado según sus intereses y necesidades elementos que le servían de acompañamiento a sus músicas folklóricas, y cada pueblo aborigen, cada civilización, cada región, tiene sus propias creaciones en instrumentos musicales, acordes con los ritmos autóctonos.
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