Operaciones a realizar en caso de parada de la cabina
– Cortar la corriente general del ascensor al mismo entrar en la sala de máquinas, desconectando los interruptores, ya sean diferenciales o magnetotérmicos.
Este paso es muy importante para no provocar un accidente, incluso aunque la parada se deba a un apagón general en el edificio o en la zona.
– Averiguar entre qué plantas se encuentra parada la cabina. Podemos preguntar a los atrapados o mirar cuando subamos por la escalera o por los huecos existentes en la losa donde apoya la maquinaria.
– Asegurándose de que la corriente está desconectada, accionar el freno hasta comprobar que queda abierto (en general debe hacerse con una palanca especial que estará dentro de la sala de máquinas). El freno se encuentra siempre sobre el reductor o entre el reductor y el motor.
Cuando lleguemos, los frenos estarán bloqueados, por tanto debemos accionar la palanca que lo neutraliza hasta que observemos que el eje de la máquina se puede mover fácilmente.
Si observamos atentamente, veremos que las mordazas de la zapata se separan al abrirle. Nunca moveremos un ascensor juntando las mordazas.
– Moveremos lentamente el volante de la polea (por el que pasan los cables que sujetan la cabina, a veces lleva una protección desmontable que debe quitarse) comprobando antes qué sentido debe hacerse para que la cabina suba o baje. Normalmente, estará marcado con una “S” (subida) y una “B” (bajada), marcadas sobre la máquina, el motor o en la pared.
– Siempre debemos mover la cabina en el sentido en que sea más fácil, observando que se está moviendo. Si no se mueve, puede estar acuñado y los cables patinarán sobre la polea. Si se acelera el movimiento del volante, soltar el freno inmediatamente.
– Uno de los Bomberos, comunicado con el que está en la sala de máquinas por radio, estará pendiente de que llegue a situarse la cabina a nivel con la puerta del piso. En ese momento se debe sacar el freno y avisar que ya puede abrirse la puerta y sacar a los atrapados.
Si no se abre, utilizaremos la llave especial que funciona girando un poco para desbloquear el tope y presionando la puerta hacia fuera. Si no tenemos llave, le diremos a los ocupantes que traten de mover la cabina hacia los lados y dar con la mano en la puerta, a la altura de la cerradura.
Si estamos solos en la sala de máquinas, le diremos a las personas atrapadas que estén atentos para realizar ellos mismos esa maniobra.
– Si el ascensor tiene puertas automáticas, deberá terminarse de abrir la puerta de la cabina manualmente o, por el contrario, lo haríamos nosotros desde el exterior por medio de la llave de emergencia.
– Si se trata de un ascensor hidráulico, el proceso a seguir es muy parecido, pero en lugar de abrir el freno, accionaremos la válvula de bajada teniendo en cuenta que el ascensor sólo se podrá accionar a mano hacia abajo. Si está acuñado y no baja, habrá que realizar el rescate por la puerta de piso más próxima.
– Dejar la corriente cortada y comprobar que todas las puertas de los pisos quedan perfectamente cerradas. Advertir a los responsables del edificio de que conviene llamar a la empresa conservadora del ascensor antes de ponerlo en marcha para que haga las comprobaciones pertinentes.
Fuente: Manual S.E.P.E.I. de Bomberos, Publicaciones de la Diputación de Albacete