En los desplazamientos por zonas inundadas
Se deben adoptar las siguientes precauciones:
1º) Conducir con las técnicas adecuadas, con velocidad corta y avanzando muy lentamente para que el agua no salpique el motor y pueda pararlo.
Los frenos no funcionan bien si están mojados, por lo tanto, deben comprobarse varias veces después de cruzar.
2º) No atravesar las corrientes rápidas de agua con un vehículo, salvo que sea absolutamente necesario. En este caso adoptar las máximas precauciones y tener siempre en cuenta que:
-Una, aparentemente, pequeña depresión en el nivel de la carretera puede tener una considerable profundidad de agua.
-Si el nivel del agua supera la altura de los ejes de las ruedas, el vehículo podrá ser fácilmente arrastrado por la corriente sin que pueda hacerse nada para evitarlo.
-Si no se ve claramente el firme de la calzada, es posible la existencia de socavones, arrastres del terreno, puentes destruidos, etc., en donde el vehículo podría caer.
-Si la corriente de agua es muy rápida arrastrará rocas, troncos de árboles, que pueden impactar con enorme fuerza contra el vehículo.
-Si el vehículo se atasca en medio de la corriente, valorar la conveniencia de abandonarlo inmediatamente y dirigirse a un lugar alto y seguro. Si el vehículo está sumergiéndose en el agua y no se puede abrir la puerta, salir por las ventanillas sin pérdida de tiempo.
3º) No atravesar a pie las corrientes rápidas de agua, salvo que sea absolutamente necesario. En este caso adoptar las máximas precauciones y tener siempre en cuenta que, si el nivel del agua supera 15 cm de profundidad, la fuerza de la corriente y el impacto de los arrastres pueden derribar fácilmente a una persona por muy corpulenta que sea.
Si el nivel del agua supera la altura de sus rodillas, ese peligro es mucho más elevado.
Para atravesar a pie zonas embalsadas, aún sin corriente, usar un palo o bastón para comprobar que, donde van a ponerse los pies, hay terreno firme.
4º) No acercarse a instalaciones y líneas eléctricas. Incluso a cierta distancia, la electrocución es posible ya que la corriente eléctrica puede transmitirse a través del agua.
5º) Alejarse de las bases de las laderas para no verse atrapado por el agua que, a menudo, arrastra barro, restos de árboles y piedras.
Fuente: Manual S.E.P.E.I. de Bomberos, Publicaciones de la Diputación de Albacete