Letras superpuestas al final del renglon

Este error proviene casi siempre de un método de digitación defectuoso. Si el operador emplea únicamente uno o dos dedos de la mano, es muy fácil perder la localización de una letra cuando se salta de una tecla a otra, particularmente si las letras están muy separadas.

Esta es otra de las razones que hacen recomendable el método de digitación con todos los dedos, porque cuando las filas del teclado se distribuyen entre los diferentes dedos y acostumbra a cada uno de ellos a no tocar más que determinadas letras, es evidente que casi no habrá movimiento de la mano y de la muñeca, y por consiguiente, la posibilidad de errores queda reducida al mínimo.

Regularidad y precisión

Los principiantes deben ejercitarse en determinar el momento preciso en que incurren en un error, sin necesidad de mirar lo escrito. La regularidad y precisión en la escritura con máquina, se adquiere mejor cuando el operador no se fija en los movimientos de los dedos, ni ve lo que va escribiendo. Si el trabajo que se ejecuta es la copia de notas taquígrafas, lo más práctico es tener la vista fina en el papel de que se copia, y desatender por completo lo demás.

Durante los primeros ejercicios se escribirá despacio, sin precipitaciones, que a nada conducen, repitiendo cada palabra o frase sin mirar el teclado.

Conforme se vayan adiestrando los dedos, se irá acelerando la digitación, conquistando poco a poco, y a fuerza de perseverancia, las mayores velocidades, que se determinarán precisamente cuando se domine el teclado por completo, y se adquiera el verdadero hábito de la escritura mecánica, por el método de la escritura de tacto.

Los movimientos de los dedos deben ser acompasados; ninguna tecla debe ser tocada con mayor rapidez ni fuerza que las otras.

Nunca nos cansaremos de advertir que al principio es cuando ha de tratarse de evitar o corregir las tendencias que tenga el operador a la adquisición de hábitos defectuosos. Después es más difícil corregirlos.