Fotografías o ilustraciones
Al marcar las fotografías o ilustraciones es indispensable saber si éstas se ajustarán en proporción al espacio que les hemos asignado, para ello se calcula aritméticamente si el espacio es correcto.
Para lo anterior se debe medir el ancho y el alto de la fotografía original y calcular el otro lado mediante una regla de tres simple.
Otro procedimiento consiste en trazar una diagonal sobre la fotografía original. Al medir sobre ésta última uno de los lados, conocemos automáticamente el otro lado.
Aunque este procedimiento es anticuado, aún se sigue utilizando por aquellos diseñadores y dibujantes que no cuentan aún con computadora con programas de diseño profesional.
Para quienes cuentan con computadora el procedimiento se facilita, ya que en este equipo se dibujan todos los elementos y ahí mismo se combinan los que se van a imprimir en cada color de forma definitiva. Asimismo, se insertan las fotografías o ilustraciones a incluir.
Por último, es importante considerar que el señalamiento de los registros se debe incluir para que una vez determinada la imposición definitiva se puedan ir tomando las páginas independientes de los archivos electrónicos y se vaya formando el pliego en el tamaño definitivo de impresión, incluyendo los medianiles o separaciones de las páginas.
Por último, el original mecánico se cubre con una camisa de albanene en la cual se hacen todas las indicaciones que se consideren pertinentes y ahí mismo se señalan el color o colores de Pantone que deberán imprimirse según el original, para que el fotolito se encargue de hacer uno o varios negativos (según la cantidad de tintas a imprimir y lo complicada que sea la separación de color).
Hay que recordar que mientras más claros y detallados sean los originales, en el fotolito se tendrán menos problemas de interpretación, lo cual permitirá obtener los resultados deseados.
Es importante observar que el original contenga lo siguiente:
– Registros de
– Corte, en color negro.
– Color.
– Doblez y suaje en negro.
– Imágenes
– Que estén indicadas el número de líneas a que se va a imprimir.
– Indicar las proporciones (es mejor tener que reducir que ampliar por la calidad).
– Todos los elementos necesarios: dibujos, texto e imágenes.
– Aprobación del cliente (firma)
– Datos del cliente y del diseñador en la parte trasera (Nombre, empresa, teléfono).
– No olvidar que todas las camisas tienen que coincidir.
Fuente: Apuntes de Introducción a los Sistemas de Impresión de la U de Londres