Tundra

Al norte del círculo polar Ártico se extiende una v asta región sin árboles, con una estación de crecimiento muy breve (junio-julio), temperaturas sumamente bajas durante el invierno y temperaturas frías inclusive durante el breve verano, y un suelo permanentemente helado el«permafrost» debajo de la superficie. Este es el bioma de tundra ártico. En estas condiciones rudas sólo se encuentran unas pocas especies de animales, aunque sus poblaciones alcanzan a menudo cifras muy elevadas. Los visitantes humanos de las regiones de la tundra encuentran a menudo que los mosquitos son organismos abrumadoramente abundantes en el verano ártico.

La mayoría de los mamíferos son especies de madriguera, tales como los lemmings y los ratones. Algunos de los mamíferos mayores, tales como el caribú y el buey almizclero, han de desplazarse anualmente en busca de alimento. Estos herbívoros sólo se alimentan en la zona de la tundra durante el breve periodo de producción de hierbas y líquenes.

Otros animales migratorios, especialmente las aves, dependen para su alimento de organismos más pequeños, que sólo se muestran activos durante los meses más cálidos del verano. La vida vegetal está representada por numerosas especies de líquenes, musgos y plantas fanerógamas de crecimiento reducido, tales como juncos, hierbas y arbustos resistentes, que crecen en matas tupidas sobre la superficie del suelo.

Las cadenas y los tejidos de alimentos son relativamente sencillos en el Ártico y, por esta razón, han sido bastante bien estudiados por los ecólogos. Hay una gran cantidad de humedad anual en la tundra, pero mucha de ella está ligada a la nieve o al hielo permanente, o se pierde por evaporación. Así pues, los organismos de la tundra disponen de relativamente poca agua.