Sistema sexo – genero
El término sexo en primer lugar tiene que ver con las diferencias biológicas entre hombres y mujeres. Esto es algo constante y definitivo. Una mujer tiene, por ejemplo, órganos reproductores diferentes a los de los hombres. Durante la historia sin embargo se ha agregado características culturales al término sexo.
Las características culturales tienen que ver con las normas, los valores, las pautas que cada cultura y cada sociedad han desarrollado. Esto significa que en muchas culturas, como la nuestra entre otras, la palabra sexo no solamente tiene una significación biológica sino también cultural Estamos hablando de lo que la sociedad considera como femenino y masculino.
Dentro de lo biológico es normal que la mujer se embarace y dé a luz a los niños, pero no es normal que la mujer sea la principal responsable de ellos. Lo biológico también determina hasta cierto nivel la fuerza física de la persona, pero esto además tiene una parte cultural Las normas culturales, predominan ciertas conductas, ciertos aspectos físicos. En nuestra cultura, por ejemplo, no es normal que las mujeres desarrollen sus músculos. En países africanos, sin embargo, las mujeres están acostumbradas a llevar bultos muy pesados en su cabeza y espalda. Estas mujeres tienen una fuerza física muchas veces más grande que hombres de su mismo país.
La misma sociedad transmite su ideología. Esto pasa en la formación, en la educación, en la socialización y marca las diferencias entre hombres y mujeres. En la mayoría de las sociedades las mujeres tienen menos oportunidades que los hombres. Las mujeres tienen posiciones de menor importancia, están ubicadas en la esfera familiar, dependen muchas veces de los hombres, no tienen acceso a los niveles donde se toman las decisiones, etc.
Ahí hablamos de la subordinación de las mujeres. Esto significa que las mujeres en comparación con los hombres tienen más restricciones sociales y menos oportunidades por razones ideológicas y culturales. Para explicar estas diferencias que ya no son biológicas sino culturales e ideológicas usamos el término género, que implica que la subordinación de la mujer, su posición en la sociedad, su exclusión de algunos sectores sociales no tiene que ver con las diferencias en sexo, sino con las diferencias de género.
En lo que la sociedad define como femenino y masculino existen diferencias entre los clases sociales. La sociedad y la gente que forma parte de ella tienen muchas justificaciones para mostrar que las diferencias que existen entre hombres y mujeres son naturales. Otra explicación que muchas veces se da es que las mujeres no son capaces de participar en la política o de trabajar en puestos altos donde se toman las decisiones porque son más emocionales y más irracionales que los hombres.
En la práctica las mujeres han mostrado que esto no tiene una base real. Las mujeres se ven confrontados con conflictos internos de su identidad de género. Esto significa que la realidad práctica de las mujeres ya no corresponde con la ideología oficial.
En algunos casos las mujeres desarrollaron una cierta forma de resistencia, que tiene distintas formas de expresión. Algunas mujeres desarrollaron un sentido de autovalorización, otras usan su sexualidad para obtener poder o ciertas posiciones y posibilidades. También hay un grupo de mujeres que desarrollan más bien formas de protesta más implícitas, como síntomas psicosomáticos.
Fuente: Taller centroamericano para formadores de promotores de microempresas