Taxonomía de las capacidades tecnológicas empresariales
La taxonomía de Rush y asociados sirve como guía para conocer el perfil que podría tener una EBT de acuerdo con sus capacidades tecnológicas. La ventaja es que si se conoce el nivel de capacidades tecnológicas en una empresa es posible, en principio, clasificarla directamente como EBT y entonces identificar el mercado más propicio para sus productos. Si nos atenemos a la taxonomía de Rush y sus colegas, es posible inferir que la probabilidad de que haya negocios con rasgos de empresa tipo EBT en México es muy baja dada la notable ausencia de capacidades tecnológicas en el sector industrial nacional (Pérez y Merrit, 2011).
Aún así, el número potencial de las EBTs mexicanas ronda alrededor del cinco por ciento del universo de empresas manufactureras, el cual se ajusta a los primeros dos niveles de la taxonomía de Rush y asociados, de acuerdo con los datos proporcionados por el INEGI en su último censo económico (INEGI, 2010).