Desprendimiento de trozos de ladrillo
Este daño comprende un número reducido de unidades contiguas sin afectar la estabilidad ni la resistencia del muro.
Para reparar este daño necesitas:
- Cincel
- Martillo
- Espátula
- Llana
- Batea
- Escobilla
- Mortero de reparación predosificado
- Piezas de ladrillo de reemplazo
Si el daño compromete un 40 % del ladrillo se recomienda reemplazarlo por completo.
Para ello debes retirar despegándolo picándolo con el cincel y el martillo, retira el material suelto, limpia el sobrante de partículas sueltas y el polvo con la escobetilla.
Coloca el mortero de reparación en la cara superior y en las caras laterales del ladrillo existente.
Introducir el nuevo ladrillo con mezcla en su cara superior. Verificar que el ladrillo haya quedado aplomado con el resto del muro.
Termina con el relleno de las canterías con el mortero de reparación, presionando hacia el interior con la espátula. Dar la terminación adecuada.