Competencias docentes para acompañar el aprendizaje

Es del todo equivocada la creencia que las tareas, funciones y competencias de un profesor en un entorno en línea, debido a que no existen las clases magistrales, son de un valor académico inferior que las que se ponen en práctica en un entorno presencial. De hecho, muchas de ellas son comunes y sólo algunos aspectos definitorios de las competencias necesarias para ser un buen docente caracterizan el trabajo en un entorno en línea. Existen un gran número de autores que han definido este conjunto de tareas, funciones y competencias (Goodyear, 2001; Hargreaves, 2003; Álvarez, Guasch y Espasa, 2006).

El modelo de profesor que se dibuja como un acompañante del aprendizaje requiere de competencias que permitan desarrollar un conjunto complejo de tareas y destrezas que supongan apoyo en los planos cognitivo, socioafectivo y didáctico. Para que el estudiante alcance sus objetivos satisfactoriamente, este acompañamiento debe ser sistemático. Las competencias a las que nos referimos son:

  • Ser capaz de captar, conocer y expresar emociones a través de los instrumentos y posibilidades que ofrece un entorno en línea: Es necesario que el profesorado tenga la habilidad de expresar y captar la carga de comunicación afectiva durante la comunicación mediada por un entorno en línea. El profesor deberá poner ejemplos de esta expresión de emociones y deberá fomentar que exista comunicación en este plano en los mensajes (privados y públicos) que se van dando en la formación en línea.
  • Ser capaz de tener y transmitir empatía con los estudiantes en diferentes situaciones de la formación: La empatía, como competencia interpersonal y como actitud, no es fácil de adquirir y de demostrar, pero es importante que como profesor se desarrolle como una de las habilidades que más nos ayudará a conocer a nuestros estudiantes y a conectar con ellos. Tener estrategias para conocer y ser capaz de entender lo que está sucediendo en el otro lado de la pantalla mejorará nuestra calidad como profesionales de la educación (Bautista, 2007).
  • Ser capaz de crear y mantener un clima de motivación por el aprendizaje: La motivación es uno de los pilares fundamentales para el aprendizaje. La presencia sistemática del profesor y el acompañamiento de la actividad de aprendizaje debe estar apoyada en acciones que motiven a los estudiantes.
  • Ser capaz de disponer un entorno, unos recursos y unas actividades para facilitar el aprendizaje: Acompañar es saber diseñar y planificar una formación que haga una propuesta al estudiante que facilite y fomente su progreso. La planificación debe estar centrada, como ya se ha apuntado, en la actividad de aprendizaje del estudiante y no en la tarea de enseñar que se atribuye tradicionalmente al profesor.
  • Ser capaz de asesorar en el proceso de aprendizaje atendiendo a las necesidades e intereses individuales: Cada estudiante empieza un proceso de formación con unas necesidades y expectativas individuales. El profesor debe atender al conjunto del grupo sin que ello sea motivo para no intentar que cada estudiante pueda desarrollar las competencias propuestas en relación a lo que a él más le pueda interesar.
  • Ser capaz de investigar sobre la propia práctica docente en entornos en línea y la actividad de aprendizaje del estudiante: Ser profesor implica una actitud de mejora constante en la práctica docente. Una de las competencias que actualmente demanda la universidad a sus profesores es la de ser capaz de reflexionar sistemáticamente e investigar sobre el desarrollo de su propia práctica, con el objetivo de mejorar lo que ofrecemos al estudiante y comprender mejor cómo éste desarrolla su actividad de aprendizaje en estos entornos.

Por último, otra de las necesarias habilidades que deberá pre-sentar el profesorado en un entorno virtual es la de trabajar en equipo junto a otros compañeros (docentes o no), con el objetivo de enriquecer el escenario y la propuesta formativa presentada a los estudiantes y realizar así un eficiente acompañamiento a su aprendizaje.

Fuente: Bautista Guillermo, Evolución y retos de la Educación virtual, Construyendo el E-learnig del siglo XXI, Editorial UOC, Barcelona.