Esterilización y desinfección del consultorio, materiales y equipo
El consultorio deberá contar de paredes y pisos de fácil lavado, evitando apliques innecesarios o materiales rugosos o porosos que dificulten la higiene del consultorio.
La escupidera deberá ser higienizada después de cada paciente eliminando todo tipo de residuos que se pudieran acumular, debiendo utilizar desinfectantes químicos. La charola de trabajo deberá mantenerse en buenas condiciones de higiene durante toda la jornada de trabajo.
Para lograrlo es recomendable colocar sobre el mismo campos descartables, que se cambiarán luego de la atención de cada paciente.
Con relación a la lámpara se debe forrar el mango, el mismo que deberá ser cambiada después de cada paciente.
El instrumental deberá ser esterilizado o desinfectado en cajas cerradas o envuelto correctamente en papel, identificando para cada caso la fecha en que dicho procedimiento se realizó.
Las fresas deben ser esterilizadas o desinfectadas como el resto del material y guardadas en cajas metálicas.
La esterilización y desinfección de los materiales reutilizables directamente vinculados a la atención de pacientes deberán seguir la secuencia siguiente:
– El material sucio deberá ser primeramente sumergido en una solución de hipoclorito al 0.5% o glutaraldehído al 2% durante 20 minutos.
– Luego se procederá al cepillado con detergente neutro o enzimático a fin de remover la materia orgánica.
– Enjuagado con abundante agua corriente de arrastre y secado.
– Finalmente esterilizado o desinfectado.
Tazas de goma, espátulas y cubetas no metálicas se desinfectarán con glutaraldehído al 2% durante 20 minutos o hipoclorito de sodio al 0.5% 20 minutos o aplicando alcohol 70º C mediante fricción mecánica.
El personal debe conservar un adecuado estado de salud, la Inmunización contra la hepatitis B. La inmunización comprende tres dosis (la segunda al cabo de 1 mes y la tercera a los 6 meses) y protege por un periodo de 10 años transcurridos los cuales se requiere un refuerzo. que para el contagio de una hepatitis B, solo se requiere un “pinchazo” con 0,004 ml de sangre contaminada.