Trastorno obsesivo compulsivo

Concepto

Es un trastorno de ansiedad (como la agorafobia y la fobia social) caracterizado por pensamientos intrusivos, recurrentes y persistentes, que producen inquietud, aprensión, temor o preocupación, y conductas repetitivas, denominadas compulsiones dirigidas a reducir la ansiedad asociada. Afecta al 2% de la población mundial, con igual incidencia en hombres y en mujeres, y que suele aparecer en la adolescencia o a lo largo de la juventud.

Causas

El trastorno obsesivo-compulsivo es más común de lo que alguna vez se pensaba y la mayoría de las personas que lo desarrollan muestra síntomas hacia la edad de 30 años.

Hay varias teorías acerca de la causa del trastorno obsesivo compulsivo, pero ninguna ha sido confirmada. En algunos informes, este trastorno se asocia con un traumatismo craneal o con infecciones. Algunos estudios han mostrado que hay anomalías cerebrales en pacientes con este trastorno, pero se requiere de más investigación.

Síntomas

Las obsesiones consisten en imágenes, ideas o pensamientos que son recurrentes e intrusivos, es decir, el paciente que las sufre tiene la sensación de que se han introducido en su cerebro pero que nadie le ha impuesto desde fuera sino que es su propia mente quien las ha creado y que pese a saberlas absurdas e intentar oponerse a ellas no puede hacer nada para frenarlas o evitarlas. Esta sensación de ocupación se reviste de un grado de ansiedad que va en aumento a medida que el paciente intenta deshacerse de dichas obsesiones.

Las obsesiones más frecuentes son:

  • Enfermedad
  • Limpieza y contaminación
  • Duda e inseguridad
  • Orden y simetría
  • Daño a otros
  • Moralidad y sexualidad

Pruebas y exámenes 

Su propia descripción del comportamiento puede ayudar a diagnosticar el trastorno. Un examen físico puede descartar causas físicas y una evaluación psiquiátrica puede descartar otros trastornos mentales.

Los cuestionarios, como la Escala Obsesivo Compulsiva de Yale-Brown, pueden ayudar a diagnosticar este trastorno y hacerle un seguimiento al progreso del tratamiento.

Diagnóstico

El diagnóstico se basará ante la sospecha de un paciente o de su entorno cercano de que este presenta actitudes y pensamientos repetitivos, en ocasiones absurdos y que se revisten de ansiedad e interfieren con las actividades de la vida diaria en mayor o menor medida.

Para poder establecer el diagnóstico se debe dar:

  • La existencia de obsesiones como ideas intrusas que el paciente quiere evitar y que sabe absurdas pero originadas por su propia mente.
  • La existencia de compulsiones que buscan evitar la ansiedad causada por la obsesión o bien prevenir lo que pueda suceder.
  • El paciente debe reconocer en algún momento dado que las obsesiones y compulsiones son excesivas.
  • Las obsesiones y compulsiones deben vivirse mal e interferir con la vida diaria.
  • No debe existir un trastorno físico o psiquiátrico simultáneo que pueda explicar estos síntomas.

Tratamiento

El trastorno obsesivo compulsivo se trata utilizando medicamentos y terapia.

El primer medicamento que se considera usualmente es un tipo de antidepresivo llamado inhibidor selectivo de la recaptación de la serotonina (ISRS). Estos medicamentos abarcan:

  • Citalopram (Celexa)
  • Fluoxetina (Prozac)
  • Fluvoxamina (Luvox)
  • Paroxetina (Paxil)
  • Sertralina (Zoloft)

Si un antidepresivo ISRS no es efectivo, el médico puede prescribir un tipo de antidepresivo de la vieja generación llamado antidepresivo tricíclico. La psicoterapia se puede utilizar para:

  • Brindar formas efectivas de reducir el estrés
  • Reducir la ansiedad
  • Resolver conflictos interno