Consideraciones efectivas para evitar malgastar el tiempo

Las siguientes son algunas de las consideraciones esenciales para evitar desperdiciar el tiempo en un día laboral:

1. Conoce con claridad las metas en tus proyectos
Cuando no tenemos en mente cuáles son nuestras metas que deseamos lograr, es fácil distraernos y hacer mal uso de nuestro tiempo. Es recomendable saber cuáles son tus metas a corto, mediano y largo plazo y elaborar una lista.

2. Dedica algunos minutos a administrar tu tiempo
Realiza una lista de “cosas por hacer”, te darás cuenta de esa forma cuánto tiempo empleas en una actividad y así distribuir tu tiempo de manera más eficiente.

3. Aparta un horario para contestar solo correspondencia y llamadas
Si estás todo el día pendiente de la correspondencia (digital o física) y las llamadas, será casi imposible que puedas concentrarte en las actividades destinadas a cumplir, por eso es necesario considerar un tiempo específico al día para estas cuestiones.

4. Evita a personas distractoras
Es fácil identificar aquellas personas que son “ladrones de tiempo”, solo es necesario hacerse dos preguntas clave: ¿cuál es la finalidad de la plática? y sí ¿puede ser aplazada esa plática?; de esa forma podremos determinar la importancia de continuar o posponer la misma, una plática en horarios productivos que nos aleja de nuestras metas, debe ser terminada a la brevedad.

5. Concéntrate en las actividades planteadas
Si realizas tus actividades rápido y mal, seguramente vas a terminar desperdiciando tu tiempo, es importante eliminar las distracciones y estar al 100% enfocado en lo que se está efectuando.

6. No dejes de hacer lo importante
En ocasiones hay tareas de gran relevancia y otras que no la tienen, resuelve y dale prioridad a las tareas importantes aunque no sean las más agradables, al finalizar, comenzarás a sentir menos presión.

7. Organiza tus espacios
En un ambiente ordenado la productividad puede encontrar cabida, dedica tiempo a la clasificación de papeles, realización de listas de pendientes y en general a todas aquellas actividades que coadyuven a obtener tiempo de calidad.

8. Asigna una fecha para la cual te gustaría ver realizada cada una de tus metas
No te preocupes si esta fecha está a dos o más años de distancia, recuerda que aquello que verdaderamente importa requiere que se le invierta esfuerzo y el tiempo suficiente.

9. Identifica todas las metas a corto plazo, objetivos intermedios, acciones y actividades que puedas llevar a cabo a diario
Este es uno de los pasos estratégicos, una gran meta que no pueda traducirse en actividades diarias carece de base para ser alcanzada, ya que son las actividades diarias las que producirán la concreción de grandes metas.