Antón Semiónovich y sus aportes a la pedagogía

Antón Semiónovich (1888-1939), pedagogo soviético cuyas planteamientos buscaban establecer principios democráticos en la teoría y la práctica educativa influyeron en el sistema escolar comunista.

Makarenko se desempeñó como maestro en una escuela elemental, para trasladarse en la década de 1920 a la Colonia Gorki, un reformatorio para delincuentes, y posteriormente, a la Comunidad Dzerzhinski, institución penal en la que ejerció la enseñanza hasta el final de sus días.

Las teorías de Makarenko, puestas en práctica en las instituciones mencionadas, impactaron a la Unión Soviética de su tiempo. Se basaban en la relación entre la educación, la política y la ciencia, así como en el papel de la educación en la elección del tipo de vida y la integración de todo ello en la vida cotidiana.

En contraste con las ideas de libertad en la educación, que dominaban en los primeros tiempos de la Revolución Rusa, el sistema de Makarenko se centraba en la importancia de la disciplina y el trabajo en el ámbito de la educación. Propuso la asignación de tareas a niños que les permitieran desarrollar el sentido de la responsabilidad, y luchó por imponer una educación orientada a la formación del hombre que respondiera a las expectativas de la sociedad.

Makarenko luchó por un enfoque pragmático en el que los cambios en el desarrollo de la personalidad del niño estuvieran “dirigidos y controlados por el maestro”. Entre sus obras más relevantes destcana: Poema pedagógico o El camino de la vida, 1933-1935 y Kniga dlya roditeley (Un libro para los padres, 1937).