Aportes del constructivismo al campo educativo
El aprendizaje se produce cuando el estudiante, como arquitecto de su propio conocimiento, relaciona conceptos que va a aprender y les da sentido, a partir de los esquemas de conocimiento que ya posee. Para que los aprendizajes sean verdaderamente significativos, es necesario distinguir aquello que el estudiante es capaz de hacer y aprender por sí solo y lo que es capaz de aprender con la ayuda de otras personas (ZDP).
De acuerdo con Cesar Coll (1990, op. cit, 441-442), el aprendizaje y la enseñanza, desde la perspectiva constructivista, se organizan en torno a tres ideas fundamentales.
- El estudiante es el responsable último de su propio proceso de aprendizaje; él esquien construye el conocimiento; nadie, ni siquiera el docente, puede ocupar su lugar, ya que el aprendizaje es un acto individual y nadie aprende por otro. Él construye su aprendizaje cuando manipula, explora, descubre, inventa, lee o escucha las explicaciones del profesor o de los compañeros.
- La actividad mental constructiva del estudiante se aplica a contenidos que ya hansido elaborados (mediación social), es decir, son el resultado de un ciertos procesos de construcción en el ámbito social (saberes y formas culturales). Los estudiantes construyen o reconstruyen objetos de conocimiento, que de hecho están construidos. Por ejemplo, elaboran su sistema de la lengua escrita, pero este sistema ya ha sido elaborado; generan las operaciones aritméticas elementales, pero éstas ya están definidas; construyen el concepto de tiempo histórico, noción que forma parte de su bagaje cultural; elaboran las normas de relación social, pero dichas normas son las que regulan normalmente las relaciones entre las personas.
- El hecho de que la actividad constructiva del estudiante se aplique a unos contenidos de aprendizaje preexistente, condiciona el papel del docente. Su función no se limita únicamente a crear las condiciones óptimas para que el estudiante despliegue una actividad mental constructiva, rica y diversa; el docente orienta esta actividad, con el fin de que el estudiante se acerque, de forma progresiva a los conocimientos, teorías y saberes culturales.
Otra de las aportaciones del constructivismo ha sido identificar al estudiante como parte fundamental de los procesos de enseñanza y aprendizaje, ya que él, es quien construye sus propios conocimientos. A partir de este reconocimiento en la educación a distancia se desarrolla el diseño instruccional, en el cual se incluyen materiales didácticos y medios de comunicación que permitan la interacción didáctica entre los estudiantes y el docente.
El papel del docente también se ha visto modificado, ha dejado de ser la parte central de la enseñanza, actualmente se ve como mediador y facilitador de aprendizajes, donde no es él la única fuente de información y conocimientos nuevos, sino que de acuerdo con las estrategias de enseñanza y aprendizaje, que utilice el estudiante construirá sus propios conocimientos. El profesor identifica aquellas actividades que un estudiante todavía no es capaz de realizar por sí mismo, pero que puede llegar a solucionar si recibe la ayuda pedagógica adecuada, a través de la tutoría, ya sea presencial o mediada.
Otra más de las aportaciones del constructivismo, lograr aprendizajes significativos, es el uso de los organizadores previos propuestos por Ausubel. Consisten en la presentación de materiales introductorios, relevantes e inclusivos, antes del aprendizaje. Son materiales en prosa o representaciones gráficas que se muestran antes de la lección, clase, unidad, curso o material de lectura, con el propósito de crear en los estudiantes una estructura de conocimiento previo que permita la asimilación de información nueva.