Agricultura situación actual México
El sector agrícola ha estado deprimido durante las últimas dos décadas, período a lo largo del cual México pasó de ser autosuficiente en alimentos básicos a importador de los mismos. La industria se puede dividir en dos sectores: por un lado, las grandes granjas comerciales (orientadas hacia la exportación) y por el otro, las pequeñas granjas, las pequeñas agro-empresas y la agricultura de subsistencia del campesino.
Se revisará el sector agrícola a la luz de su situación actual en relación con las negociaciones del Tratado de Libre Comercio y la base acordada para la participación mexicana en el Tratado.
A continuación se presentan un resumen de los puntos importantes del sector agrícola negociados en el Tratado y una indicación de los efectos de su aplicación para México, con base en estudios de las principales autoridades en el campo tanto en México como en Estados Unidos.
Este sector se considera importante a nivel empresarial porque incluye una gran proporción de las granjas y las agro-empresas más pequeñas y, a la luz de la sustentabilidad futura, la agricultura forma una importante base alimenticia para el país.
Con base en análisis elaborados por el Centro de Investigaciones Económicas, Sociales y Tecnológicas de la Agroindustria y la Agricultura Mundial (CIESTMM) de la Universidad Autónoma Chapingo, y por la Oficina de Evaluación Tecnológica (OTA) del Congreso de Estados Unidos, se publicó el siguiente reporte:
México tiene un potencial muy limitado para incrementar su producción exportable de hortalizas, debido básicamente al rezago en investigación y desarrollo tecnológicos; a la insuficiencia en los recursos acuíferos necesarios para incrementar nuestras zonas de riego; a las condiciones del mercado interno; y a los altos costos de empaque, transporte y comercialización, que anulan las ventajas que México tiene en sus costos directos de producción.
Según un documento presentado por el CIESTMM, la siguiente cita es pertinente:
Cualquier incremento en la producción hortícola de México se vinculará con el comportamiento de la demanda interna, que es creciente, y no con nuestras exportaciones, que son restringidas (el total representa apenas alrededor del 18% de la producción, según cifras de la OTA) y de hecho cubren ya el 70% de las importaciones que realiza Estados Unidos.
Más que esperar un mayor flujo de exportaciones al Norte, es previsible que nuestra producción interna se vea mermada en virtud de que los excedentes de la producción de verano en Estados Unidos se destinan cada vez más hacia México, hecho que se refleja ya desde hace varios años en un incremento de nuestras importaciones de hortalizas de ese país. (Nota: De 1985 a 1991, las exportaciones de Estados Unidos a México aumentaron en un 295%.)
Los costos directos de producción representan sólo el 36% de los costos totales, eliminándose, por consiguiente, la supuesta ventaja que México tiene sobre Estados Unidos. Por ejemplo, en costos totales se ven las siguientes comparaciones (en dólares EU por tonelada).
Brócoli: EU. (Calif.) = $ 527.26. México (Celaya) =$ 716.26
Sandía: EU.(Calif. florida) = $156.75. México (Cd. Obregón. Jalisco) = $ 308.45 Melón: EU. (Calif.) = $ 228.78, México (Colima, Apatzingán) = $ 540.35
En productos tropicales como café, cacao y frutas cítricas. :
México se enfrenta a una serie de obstáculos en relación con la competitividad de exportación.
Algunos de los principales problemas que enfrenta son:
1. Estados Unidos y México importan de otros países latinoamericanos.
2. No hay barreras a la importación desde esos países.
3. Los bajos precios mundiales desalientan la producción.
4. Desde 1988 los productos mexicanos se han visto afectados por las importaciones.
5. Las condiciones competitivas de México son pobres, con respecto a Brasil y Estados Unidos. México tiene plantíos pequeños, carece de investigación para resolver los problemas, no tiene créditos ni asistencia técnica. Además en el caso de la naranja. sólo puede producir cuatro meses al año, en tanto que Florida produce durante ocho meses y Brasil todo el año.
6. Los sustitutos del azúcar basados en el maíz se utilizan demasiado para endulzar. Durante la última década, esto ha bajado el consumo de azúcar en un 50%.
Otro punto presentado en el reporte de el CIESTAAM es:
• El establecimiento de cuotas y períodos de inclusión para varios productos hortícolas se adaptaron a la situación de oferta y demanda de Estados Unidos (restringiendo las importaciones mexicanas durante la temporada de cultivo de verano en Estados Unidos), así como los beneficios totales para los productores mexicanos son pocos, porque aún tenemos el problema de costos y comercialización.
El ahorro que logre México en el momento en que se aplique el Tratado es muy bajo. Durante el primer año representará sólo el 3.1% de las exportaciones. Además, este ahorro se concentra en muy pocas manos. En Sinaloa. por ejemplo sólo ocho grupos controlan el 80% de las exportaciones del Estado.
En términos generales el reporte concluye que el ahorro para los productores mexicanos en términos de ajustes de cuotas y aranceles para todo el sector agrícola será sólo de unos 40 millones de dólares durante el primer año comparados con unos 827 millones de dólares para Estados Unidos durante el mismo período. El reporte también concluye que los obstáculos por mejorar la productividad empiezan con la falta de investigación orientada hacia el desarrollo de tecnología apropiada para las condiciones locales.
Según el reporte de la OTA:
México tiene que lograr incrementos sustanciales en la productividad para mantener la competitividad. Necesita canalizar la inversión hacia la investigación, mejores métodos de producción y la capacitación de investigadores, trabajadores, agricultores y administradores agrícolas.
En relación con el abastecimiento del agua el reporte dice:
La demanda del agua para uso industrial y el crecimiento urbano han reducido la cantidad disponible para la irrigación… hoy en día, la mayoría de los proyectos de irrigación están planeados para reabastecimiento de agua durante una temporada de cultivo y se le ha otorgado mayor prioridad a la industria en términos de abasto de agua.
El doctor José Luis Calva Téllez, investigador del Instituto de Investigaciones Económicas Agrícolas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en la ciudad de México, informa que:
Para México, el TLC fue una pésima negociación; se puede apreciar una considerable desventaja, tanto en los plazos de apertura niveles de aranceles y la propia capacidad de subsidios a este sector.
El investigador explicó que al mantener el derecho de aplicar subsidios, el país no cuenta con recursos para hacer frente a lo que subsidia el gobierno estadounidense, que rebasa los 5,000 millones de dólares al agro.
En granos básicos y otros los 15 años de los que se habla para el maíz, fríjol y jugo de naranja son de transición. En ese lapso se dará una paulatina desgravación pero no necesariamente tiene que llegar al decimoquinto año sino que la apertura total puede ser mucho antes con tal de que el precio interno del maíz se iguale con el precio internacional. Con esta negociación se comprometió la liberalización de granos que conducirá a un incremento en la importación de granos, frutas y hortalizas al país, en perjuicio de millones de familias campesinas mexicanas sobre todo de los 3.5 millones que se dedican al cultivo de los ocho principales granos.
Entre México y sus vecinos del Norte existe una profunda brecha tecnológica y de recursos naturales. en todos los ámbitos, y ello no se corregirá con sólo eliminar las distorsiones al comercio.
Actualmente son abrumadoras las diferencias de costos (de producción) que poco beneficiarán al campesino ni siquiera la liberalización de insumos y maquinaria permitirá equilibrar las condiciones de competitividad entre México y sus vecinos del Norte. No se debe olvidar que la sustancial diferencia en costos de producción no radica en el precio de los insumos, sino en el rendimiento monetario; se ha demostrado el escaso impacto que puede tener la liberación en los insumos agrícolas.
Por ejemplo, con base en la reducción de aranceles y la apertura a la importación de fertilizantes el costo de producción de el maíz apenas disminuirá en 1.07%; algodón, en 0.46%; fríjol en 0.04%; trigo en 1.32%; y arroz en 0.51%.
Sin embargo, México aceptó abrir el mercado a la importación de productos hortofrutícolas durante todo el año y con ello se afectará en forma considerable la producción primavera-verano de nuestro país con restricciones en Estados Unidos durante el verano).
En resumen el sector agrícola se preocupa por su futuro bajo el TLC, sin embargo existen unos pequeños ejemplos que dan señales de innovación e iniciativa ante la mala situación agrícola mexicana.