La dimensión social en el proceso enseñanza-aprendizaje
El proceso de enseñanza y aprendizaje tiene lugar en un contexto social y político determinado. Cada vez se denuncian más las carencias de las escuelas en el plano organizativo porque se consideran una causa importante del deficiente aprovechamiento escolar, sobre todo en las escuelas públicas de los países en desarrollo.
Algunos estudiosos preconizan cambios radicales en la estructura de los incentivos ofrecidos a los docentes, a fin de estimular los resultados del aprendizaje. No obstante, no parece que la remuneración por méritos guarde una estrecha relación con la eficacia de los docentes.
En cambio, el contexto social de la escuela constituye una dimensión de importancia fundamental. Los estudios de sociología de la educación inducen a pensar que los alumnos cuyos medios familiares y grupos de compañeros tienen ideales cercanos a los de la escuela muestran una mayor inclinación por esforzarse a aprender, así como una tendencia más acusada a adquirir un nivel más elevado de competencias cognitivas, mientras que los alumnos cuyo ideal está en contradicción con el de la escuela pueden tratar de escapar a su situación paradójica rebelándose y disminuyendo, por ejemplo, sus esfuerzos por aprender.
La necesidad de estructurar la política de educación en torno a un objetivo social explícito plantea a la calidad de la educación una serie de desafíos que no se pueden afrontar con medios exclusivamente técnicos. Fuente: Libro de Educación para todos “El imperativo de la calidad” de la UNESCO.