La programación de la enseñanza en la didáctica de jardín maternal
La Didáctica del Jardín Maternal constituye una disciplina en vías de construcción. Si bien la Didáctica en general como todo campo del saber- está en constante revisión, en Maternal, además, debe tenerse en cuenta que su significación como actividad de carácter educativo es relativamente reciente.
En este sentido, la pedagogía y la didáctica específicas para este nivel educativo se hallan en un proceso de construcción y elaboración.
Como parte de este proceso, creemos que una tarea necesaria consiste en analizar la adecuación de los modelos teóricos elaborados para otros niveles educativos a las prácticas pedagógicas particulares de Maternal. Asimismo, en un trabaj o reciente, hemos cuestionado la adecuación de la categoría “alumno” para referirnos al educando de Jardín Maternal (Fairstein, 2005).
En dicha línea de trabajo, este artículo analiza cuestiones relativas a los modelos de programación didáctica y su adecuación a las prácticas educativas que se desarrollan en el Jardín Maternal.
Partimos de la idea de que éstos han sido elaborados teniendo en consideración un tipo de intenciones pedagógicas y contenidos de enseñanza sí como necesidades relativas a la evaluación, propios de otros niveles educativos.
Por ello, creemos que, antes de adoptarlos en el Jardín Maternal, vale cuestionar su adecuación al tipo particular de prácticas pedagógicas que se desarrollan en este nivel. Como sabemos, pueden distinguirse progresivos niveles de programación que obedecen alógicas y principios particulares.
Los debates acerca de los diferentes enfoques de planificación se vienen sucediendo desde la segunda mitad del siglo XX y entrañan discusiones ligadas, entre otras cosas, a las concepciones de enseñanza (como acción técnica – como acción práctica), de aprendizaje (como adquisición de conductas – como construcción de significados), el rol del docente (como ejecutor – como profesional reflexivo), el contenido (como instrumento para el logro de un fin – como saber con valor en sí mismo), y la relación entre la instancia de diseño y desarrollo (como isomórfica – como dialéctica).
Sin dudas, todas estas discusiones están íntimamente relacionadas en tanto una cierta concepción de enseñanza, por ejemplo, implicará modos particulares de concebir las otras cuestiones y viceversa. Como señala Camilloni, “si pensáramos que las cuestiones curriculares básicas ya han sido resueltas y que no es imprescindible someter a crítica constante los principios teóricos y prácticos que las sustentan, entonces la didáctica no sería necesaria” (2007: 20).
En segundo lugar, el hecho de que los modelos de programación hayan sido elaborados en función de determinada manera de concebir la enseñanza refuerza la necesidad de evaluarlos a la luz del tipo de acción pedagógica particular que se desarrolla en el Jardín Maternal considerando que la acción docente, los contenidos y el tipo de aprendizaje que se promueven no son iguales a los que se presentan en otros niveles educativos. Fuente: Libro de grandes temas para los más pequeños de la OMEP