Un programa de estudios amplio, pertinente e integrador
En los tratados de derechos humanos esenciales figuran unas mismas orientaciones para elaborar los programas de estudios, lo cual indica que existe un consenso general acerca de su contenido y alcance con miras a una educación fundada en los derechos humanos.
El programa de estudios debe habilitar a todos los niños para adquirir los conocimiento-tos académicos básicos y las competencias cognitivas básicas, junto con competencias esenciales para la vida activa que les permitan hacer frente a los problemas de la vida, adoptar decisiones ponderadas y llevar una vida sana, sostener relaciones sociales satisfactorias, reflexionar con sentido crítico y tener capacidad para resolver conflictos de manera no violenta.
Debe fomentar el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales y promover el respeto de las culturas y los valores diferentes y del entorno natural.
El Comité de los Derechos del Niño dispone que el programa de estudios, tanto en la primera infancia como en la escuela, debe guardar una relación directa con el marco social, cultural, ambiental y económico del niño y con sus necesidades presentes y futuras y tomar plenamente en cuenta las aptitudes en evolución del niño.
El programa de estudios debe ser integrador y ajustado a las necesidades de los niños que se encuentren en circunstancias diferentes o difíciles.
Todos los materiales didácticos y de aprendizaje deben estar libres de estereotipos de género y de representaciones dañinas o negativas de cualquier grupo Étnico o indígena.
Para que todos los niños con discapacidad puedan hacer realidad su potencial, habrá que adoptar las medidas necesarias para habilitarlos, por ejemplo, que aprendan a leer enalfabeto braille, darles la adecuada orientación o enseñarles el lenguaje de signos. Fuente: Libro de Un enfoque de la educación para todos basado en los derechos humanos de la UNESCO