Mantenimiento o conservación de los cultivos

Los objetivos de la conservación de los cultivos se podrían resumir en los siguientes aspectos:

a) Preservar la pureza genética del cultivo sin pérdida de ninguna de sus propiedades bioquímicas;
b) Preservar los niveles de su productividad inicial;
c) Lograr que el cultivo pueda ser transportado y manejado con facilidad. Esto último puede ser un factor esencial en la selección de un método de preservación.

En todo trabajo de Microbiología se deben conocer las características de la población con la cual se va a trabajar (propiedades morfológicas y bioquímicas).

En este sentido, tanto en la conservación como en el desarrollo del cultivo, ya sea el que suministra o el que recibe la cepa, deberían usar las mismas técnicas metodológicas.

Tanto para el mantenimiento, preparación y propagación de inóculos se deben usar métodos reproducibles que no produzcan variaciones o pérdidas de las características de la cepa empleada.

No hay métodos de mantenimiento en procesos industriales que sean comunes a todas las industrias, empleándose en algunos casos métodos específicos secretos.

El conocimiento de las características del cultivo es esencial en la elección de un método de preservación.

La identidad del cultivo puede conocerse en base a sus características de crecimiento en uno o más medios específicos, tomando en consideración propiedades macro y microscópicas exhibidas, o en base a una evaluación más exhaustiva empleando muchos ensayos bioquímicos, biológicos, inmunológicos y genéticos.

En general los cultivos no son estudiados en detalle debido a la casi imposibilidad de determinar en cada etapa si ha habido o no alteración genética.

En la mayoría de las situaciones solamente se pueden notar cambios mensurables u observables tales como pigmentación, morfología, reacciones fermentativas, propiedades microscópicas, etc.

El análisis de estos parámetros junto con la determinación cuantitativa del recuento de colonias antes y después del proceso de mantenimiento brindan la información necesaria para la correcta evaluación de la técnica de conservación a elegir.

Fuente: Apuntes de Microbiología Industrial del Programa Regional de Desarrollo Científico y Tecnológico de la OEA.