Cambiar de perspectiva para conseguir el éxito
Se suele decir que hay tres tipos de personas en el mundo: los que hacen que las cosas sucedan, los que observan lo que ha sucedido y los que dicen: «¿Qué ha sucedido?».
El número de personas que, consciente o inconscientemente, creen en el destino sorprende. Muchos de nuestros compañeros y amigos empiezan sus frases con un «Si…»:»Si los jefes supieran lo bueno que soy…, si la gente se diera cuenta del talento que tengo…, si tuviera más dinero… entonces tendría más éxito”. La cantidad de energía que gastan así y que podrían emplear en otras cosas es enorme.
Si hablamos con personas de éxito, muchas nos dirán que en la vida hay o resultados o excusas. La gente suele culpar a las circunstancias de su suerte, pero, como dijo George Bernard Shaw, las personas que avanzan en este mundo son las que buscan las circunstancias que desean. Y si no las encuentran, las crean.
Todo lo que hacemos y lo que somos —desde la cantidad de dinero que ganamos hasta el lugar donde trabajamos, desde el éxito que tenemos como padres, amigos o compañeros hasta el sitio donde vivimos— es resultado directo de las decisiones que hemos tomado.
Debemos, por tanto, empezar por aceptar que somos responsables al cien por cien de nosotros mismos y de nuestra vida, de nuestros sentimientos y de todos los resultados que consigamos. Debemos dejar de excusarnos y empezar a creer que nosotros somos la causa, en lugar del efecto.
Fuente: Pensamiento líquido por Damian Hughes