Miocardio
El miocardio, es una masa muscular contráctil, es el músculo cardíaco propiamente dicho; encargado de impulsar la sangre por el cuerpo mediante su contracción. Encontramos también en esta capa tejido conectivo, capilares sanguíneos, capilares linfáticos y fibras nerviosas.
El miocardio está compuesto por células especializadas que cuentan con una capacidad que no tiene ningún otro tipo de tejido muscular del resto del cuerpo. El músculo cardíaco, como otros músculos, se puede contraer, pero también puede llevar un potencial de acción -de conducción eléctrica-, similar a las neuronas que constituyen los nervios. La irrigación sanguínea del miocardio es llevada a cabo por las arterias coronarias.
El miocardio es un tejido excitable y presenta 4 propiedades fundamentales:
1. Excitabilidad. Es la capacidad de las células de transmitir un potencial de acción.
2. Automatismo. El automatismo es una propiedad intrínseca del corazón modulada por factores extrínsecos como la inervación vegetativa, hormonas, iones, temperatura.
3. Conducción de impulsos. Los impulsos generados por el nodo sinoatrial son conducidos por medio del Sistema de conducción eléctrica del corazón.
4. Contractilidad. La contractilidad del miocardio indica el grado de fuerza que este puede ejercer para vencer la resistencia vascular.