Precipitadores electrostáticos
Una aplicación importante de la descarga eléctrica en los gases es un aparato llamado precipitador electrostático. Este aparato se emplea para eliminar partículas de los gases de combustión, reduciendo en consecuencia la contaminación del aire.
Resultan especialmente útiles en las plantas generadoras que queman carbón y en las operaciones industriales que generan grandes cantidades de humo. Los sistemas actuales pueden eliminar más del 99% de la ceniza y el polvo del humo.
Un alto voltaje (usualmente de 40kV a 100kV) se mantiene entre un alambre que baja por el centro de un ducto y la pared externa del ducto es conectada a tierra. El alambre se mantiene a un potencial negativo respecto de las paredes, y así el campo eléctrico está dirigido hacia el alambre.
El campo eléctrico cerca del alambre alcanza valores suficientemente altos como para provocar una corona de descarga en torno a él, y la formación de iones positivos, electrones y iones negativos como el O2. A medida que los electrones y los iones negativos son acelerados hacia la pared exterior por el campo eléctrico no uniforme, las partículas contaminantes que están en la corriente del gas se cargan por las colisiones y la captura de iones.
Ya que la mayoría de las partículas cargadas son negativas, ésta también son arrastradas haia la pared esterior del ducto por el campo eléctrico. Al sacudir periódicamente el ducto, las partículas caen y se recogen en el fondo.
Además de reducir el nivel de gases peligrosos y partículas de materia en la atmósfera, el precipitador electrostático también recupera materiales valiosos que provienen de la chimenea en forma de óxidos metálicos.
Fuente: Apuntes de la materia de Electricidad y magnetismo del Instituto Tecnológico de la Paz