El siglo XVII
Hacia el advenimiento del siglo XVII, el gran número de plantas enviadas del nuevo al viejo mundo, no pudo ser ignorado por los botánicos y vino a ser obvio que un esquema formal fue requerido para mantener en la línea, en el brotador numeroso de unidades en el medio de los botánicos. Andrea Caesalpino (1519-1603) fue un científico italiano que mereció nuestra atención por el momento por intentar crear un esquema básico con bastante razón y lógica que superó la pura utilización de conceptos.
Él fue filosóficamente un Aristóteles en la extensión de la palabra y basó su clasificación en la suposición que ciertas partes de la estructura de las plantas fueron más significativas que otras.
Gaspard Bauhin (1560-1624) un botánico suizo, publicó una monumental obra en su Pinax theutri botanici. Es un registro de los diferentes tipos de plantas conocidas en su tiempo, y lo más importante, contiene una consideración de los nombres que varios y diferentes botánicos y herbolarios han usado para cada planta.
En otras palabras, Bauhin estimó el rápido desarrollo de la sistemática. Sus escritos son interesantes por el hecho de que hace la firme distinción entre género y especie. En el Pinax se hace uso de nomenclatura binominal y ensaya un esquema de nomenclatura.
Durante el siglo XVII John Ray (1627-1705) contribuyó al progreso de la Botánica, al publicar numerosos trabajos, entre los que sobresalen; Methodus plantarum nova (1682) e Historia Plantarum (3 volúmenes).
Inventó un sistema de clasificación en la cual las plantas que observaba eran agrupadas simultáneamente, y reconoció el hecho de que los caracteres individuales en sí mismos pueden o no valer la pena para el carácter taxonómico.
Fuente: Apuntes de Industrialización de frutas y hortalizas de la UNIDEG