Ordeño en la granja
Una vaca viene a producir unos 5.000 litros de leche por ternero, aunque algunas pueden llegar a los 10.000 litros.
El período de gestación es de unos 268 a 300 días, y cuando nace el ternero comienza inmediatamente la secreción de leche duran te unos 300 días. Este es el período normal de lactación que se ve interrumpido seis a nueve semanas antes de que vaya a nacer otro ternero. Las vacas suelen cubrirse a los quince o dieciocho meses, de forma que tienen su primer ternero cuando su edad es de dos años y medio.
El primer período de lactación aún no da toda la leche que se alcanza en el tercero que es cuando la vaca está en su mejor etapa productiva.
La secreción de la leche se produce en la ubre, que tiene cuatro cuartos, cada uno de ellos con su pezón y glándula mamaria (véase esquema 2). La leche es producida en los alveolos. El tejido glandular contiene alrededor de unos 2.000 millones de estos alveolos. Estos producen leche y va aumentando su presión interna hasta llegar a un límite, dejando entonces de producir leche que no pueden expulsar por sí mismos.
Unos músculos exteriores son los que presionan las células alveolares para que salga la leche hacia la cisterna de la ubre (1 del esquema 2), que tiene capacidad para unos 300-400 ml de leche. Los alveolos tienen un fuerte riego sanguíneo necesario para aportar los nutrientes que formarán la leche. Se necesitan de 400 a 800 litros de sangre en circulación para la producción de un litro de leche.
El ordeño de la vaca se produce por un estímulo exterior que corresponde al que realiza el ternero en el pezón cuando quiere mamar, que actualmente es sustituido por otros estímulos que provocan la secreción de una hormona llamada oxítona procedente de la glándula pituitaria situada debajo del cerebro. Esta hormona pasa a la corriente sanguínea y en unos sesenta segundos provoca una estimulación de la presión de los músculos sobre los alveolos, con lo que la leche contenida en ellos pasa a la cisterna de la ubre y de ahí a la cisterna del pezón, siendo extraída por la pezonera de una ordeñadora o por la presión de las manos del ordeñador.
Al cabo de cuatro a siete minutos la hormona antes citada se diluye en la corriente sanguínea y la vaca deja de cooperar en el ordeñado, por lo que esta operación se debe completar en el período de tiempo citado.
Como hemos dicho, el ordeño se puede hacer a mano o con máquinas ordeñadoras. Estas últimas por vacío succionan la leche de la ubre. Constan de los siguientes elementos (véase esquema 3):
– Copas de ordeño.
– Pulsador.
– Depósito.
– Equipo de vacío.
Fuente: Apuntes de Industrialización de productos lácteos de la UNIDEG