Astrología

La astrología, definida como la «superstición erudita» que querría hacer depender a los hechos terrenales de los cielos, en la antigüedad era una mezcla de conocimientos astronómicos y elementos religiosos.

AstrologíaTuvo su origen algunos milenios antes de Jesucristo en Oriente y en particular en Mesopotamia, difundiéndose en Grecia a partir de Alejandro Magno. La filosofía griega, y especialmente la escuela pitagórica, con su temor reverencial por el orden inmutable del cosmos, gobernado por precisas leyes matemáticas, preparó el terreno no sólo para un extraordinario desarrollo de la astronomía, sino también para el culto de los astros. Poco a poco todas las escuelas filosóficas griegas, a excepción del epicureísmo, fueron influenciadas por el sistema astrológico.

Aun antes de la primera era imperial, la mística astrológica había penetrado en las religiones paganas y las divinidades griegas y romanas fueron sustituidas por el dios del Sol. Todos los emperadores, la buena sociedad, el pueblo, comenzaron a creer en el poder de las estrellas para determinar la vida humana o, por lo menos, para predecir su curso.

En los siglos XV y XVI el prestigio de la astrología continuó aumentando. La ciencia de la interpretación de los astros floreció en las universidades de Roma, Padua, Bolonia y París, a pesar de la oposición oficial del Cristianismo, que no logró combatir adecuadamente, ni rechazar totalmente las concepciones teóricas que constituían la base de la astrología.

Hoy, sin querer liquidar con una definición tan categórica una doctrina que por siglos ha interesado incluso a mentes lúcidas, debemos sin embargo afirmar que la astrología como tradición religiosa no tiene ya ningún sentido, y como ciencia, hace tiempo que está muerta y sepultada. El hombre moderno no puede ser convencido del valor científico de una doctrina basada en una astronomía y en una cosmofísica superadas hace tres siglos. Tampoco puede creer en la existencia de relaciones precisas e influjos entre los astros y nuestras acciones.