Memorización problema

La idea de que memorizar datos es útil viene del modelo de la bodega, que supone que los datos pueden inventariarse en la memoria para ser encontrados cuando se necesiten. La memoria no funciona así.

La memorización no funciona muy bien, como lo señala Gardner en The Unschooled Mind (1991). Según este autor, con frecuencia ignoramos el conocimiento que memorizamos en las clases y nos basamos más en el conocimiento que adquirimos de manera incidental, es decir, en el conocimiento adquirido de nuestras experiencias cotidianas. Este conocimiento con frecuencia está equivocado, pero es el que nos viene a la mente.

La razón de que el conocimiento adquirido en los libros no venga a la mente cuando se necesita es que no está bien inventariado en la memoria. Cuando los alumnos aprenden, por lo general no son animados a utilizar el conocimiento en problemas que enfrentan, ni a relacionarlo con lo que ya saben.

Hay numerosos estudios que indican que lo que los alumnos aprenden debe tener significado para ellos. Sin embargo, las escuelas insisten en la memorización de principios y datos que se enseñan al margen de su utilización. De estos estudios hemos aprendido que, cuando los alumnos aprenden en contextos significativos, pueden transferir el conocimiento aprendido en un dominio a otro.

Cuando en las actividades de aprendizaje se utiliza lo que a los alumnos les interesa, éstos establecen índices mentales relacionando su conocimiento anterior con el nuevo, permitiendo que funcione de manera natural el razonamiento basado en los casos que conocen. Cuando a los alumnos se les dan los principios y los hechos fuera del contexto de su uso, simplemente no tienen las experiencias concretas que necesitan como materia prima para aplicar apropiadamente lo que han aprendido. Los niños no pueden comprender las generalizaciones porque les faltan más datos concretos para entender.

Al enseñar datos a los niños, debemos darnos cuenta de que los datos mismos no tienen sentido a menos que estén ligados a generalizaciones.

La memorización tiene otro problema. No es divertida. 

Autor: Luis Felipe Gómez: Coordinador de la Especialidad en Educación Cognoscitiva y profesor numerario del ITESO.