Interactividad de los medios
El desarrollo de las comunicaciones en nuestra época ha venido acompañado de un proceso cada vez mayor de interactividad con los medios. Esto quiere decir que cada vez somos menos receptores pasivos y cada vez podemos decidir en mayor medida qué es lo que queremos ver, oír o hacer. Así, un aparato será más interactivo cuanto más pueda responder a nuestras necesidades o requerimientos puntuales.
La interactividad es la posibilidad que tienen los usuarios para intervenir de manera directa en el desarrollo del mensaje a través de cualquier medio.
Digitalización, multimedia e interactividad son tres conceptos que caminan unidos en la relación que tenemos con los medios tecnológicos actuales.
Frente a la transmisión masiva de información de la que hemos hablado anteriormente, el usuario puede, en virtud de la interactividad, seleccionar el contenido que quiere obtener.
Desde la invención del teléfono, que permitía una conversación entre dos personas, la interactividad, el poder de relacionarnos de manera más natural y más profunda con los medios, ha avanzado de manera vertiginosa. Los actuales teléfonos móviles, las televisiones digitales, los ordenadores domésticos, las páginas web, etc., basan su desarrollo en posibilitar al usuario, cada vez más, la capacidad de elegir contenidos, lo que implica una diversificación cada vez mayor de los servicios que ofrecen.