Las 8 inteligencias del ser humano

El proceso educativo en nuestras vidas es complejo y se compone de muchas variables: los valores y tradiciones de nuestra familia, las costumbres de nuestra cultura, nuestras vivencias y las experiencias que podemos aprender de ellas y, en última instancia, la educación formal que recibimos.

Ésta última jugará un rol importante en nuestras vidas, ya que la mayoría de las personas deciden su futuro en base a la educación formal que han recibido.

Tanto padres como hijos confían en que los sistemas de educación tradicionales proveen las herramientas para asegurarse un buen futuro, ya que ésta posee la aptitud de preparar a una persona para que se pueda insertar en el mercado laboral con éxito.

Es todo cuestión de sacarse excelentes notas, estudiar una carrera y luego encontrar un buen trabajo.
Sin embargo, ésta fórmula de éxito no es válida para todos los niños. Si así fuera, todos los alumnos de un curso deberían poder tener buenas notas, egresar con gran éxito y encontrar un trabajo idóneo. Y todos sabemos que no es así. Dentro de un curso siempre hay un par de alumnos destacados, luego están «los del montón» y un par de alumnos considerados diplomáticamente «de rendimiento regular», que son los típicos niños con problemas escolares.

¿Por qué existe ésta diferencia siendo que la escuela supuestamente está diseñada para suplir a toda una población con la educación necesaria para salir adelante en la vida?

¿Será que algunos poseen una inteligencia superior y otros carecen de ella? ¿Es la vida realmente regida por una mal llamada «ley de la selva» en la cual el más inteligente y fuerte gana y el resto tiene que arreglárselas con las migajas que sobran?

Lamentablemente muchas personas jóvenes se quedan con ésta idea, ya que tienen malas experiencias en su período escolar. Y muchos de ellos nunca se recuperan del sentimiento de inferioridad que adquirieron en la escuela.

personalmente no creo que algunas personas simplemente nacen más inteligentes y tampoco creo en la suerte. Yo creo que cada ser humano es diseñado por Dios mismo para vivir una vida plena y con un propósito determinado. También estoy convencida de que Dios no crea fracasos. Con su inmensa sabiduría y su asombroso poder ha creado al ser humano con una gran diversidad de habilidades y talentos.

Cada ser humano tiene un área en el cual es particularmente dotado—o inteligente–y es ésta el área en el cual debería enfocarse para así poder desarrollar su fortaleza a su máximo potencial.

Se pueden distinguir 8 diferentes tipos de inteligencias, aunque existen infinitas combinaciones de todos ellas como las siguientes:

La inteligencia lingüística o verbal: la habilidad con las palabras.
La inteligencia lógica-matemática: la habilidad con los números.
La inteligencia visual-espacial: la habilidad con las imágenes.
La inteligencia corporal-kinestética: la habilidad corporal.
La inteligencia musical y rítmica: la habilidad con los sonidos.
La inteligencia interpersonal: habilidad con las personas.
La inteligencia intra-personal: inteligencia emocional.
La inteligencia natural o ecológica: habilidad con los animales y con su entorno

Fuente: EducacionParaElExito.com