Accidentes de tránsito
Los accidentes por vehículos motorizados son la principal causa de muerte en los niños de 5 a 19 años, aunque constituyen un gran peligro a toda edad.
Los accidentes pueden ocurrir como peatón, siendo el niño atropellado al atravesar la calle en forma intempestiva. Esto ocurre habitualmente mientras el niño está jugando y afecta principalmente a niños entre 5 y 9 años. Los niños menores de 4 años generalmente son atropellados por vehículos que retroceden en estacionamientos cercanos a su domicilio.
Los padres no deben dejar que los niños pequeños salgan solos a la calle y deben educar a sus hijos sobre como cruzar las calles (por ejemplo, enseñarles a cruzar en las esquinas y con luz verde peatonal).
Los accidentes también pueden ocurrir cuando el niño viaja como pasajero en un vehículo que se detiene en forma repentina o cuando se produce una colisión.
El mecanismo fundamental de producción de lesiones es la absorción de la energía mecánica producida durante el choque. Esas lesiones pueden ocurrir a velocidades tan bajas como de 40 a 50 km/hora, y la gravedad suele reflejar el tipo de sujección que usa el pasajero.
Los padres deben llevar permanentemente a sus niños menores de 4 años en una silla de seguridad debidamente fija al auto y fomentar y exigir el uso de cinturón de seguridad para los niños mayores. Es fundamental la conducción responsable y ejemplificadora de los padres, respetando las normas de tránsito.
En niños escolares y adolescentes, son también frecuentes los accidentes en bicicleta. Los esfuerzos más efectivos para reducir las lesiones en estos casos es el uso de casco.
El equipo de salud tiene un papel fundamental en la prevención de accidentes, a través de actividades educativas y consejos e indicaciones dadas a las familias durante las supervisiones de salud del niño.
Es importante el desarrollo de programas de educación y prevención en la comunidad relativo a los riesgos de accidentes, el diseño de métodos apropiados para el tratamiento oportuno y eficiente de los niños lesionados y de programas de difusión que permitan el entrenamiento de la población respecto a normas de primeros auxilios y reanimación.
Fuente: Manual de pediatría por la Dra. Patricia Valenzuela C. y el
Dr. Enrique Paris M. de la escuela.med.puc.cl